Ernesto Valverde volvió a sacar ante el Valencia CF el mismo once -a excepción de Lenglet por Vermaelen- que disputó el partido de Champions frente al Tottenham esta misma semana y el equipo lo notó.  Aunque, según el técnico azulgrana, esto no supuso ninguna excusa ya que los chés "también había jugado hace cinco días". 

El partido comenzó de la peor manera con el gol de Ezequiel Garay, pero el míster no se sintió molesto por la salida del equipo en los primeros minutos. "El equipo ha salido con la mentalidad que tenía que salir y, esta vez, en un córner que el balón ha pasado por la cabeza de todos, nadie le ha dado. Este año estamos con esa dinámica que no nos pasaba la temporada pasada y en cada partido tenemos que remontar. Siempre nadamos a contracorriente, pero esto va a cambiar", explicó.

Después de la exhibición en Wembley, el FC Barcelona parecía haber entrado en una buena dinámica de juego, pero esta no se ha visto reflejada en el marcador al partido siguiente. "Creo que hemos estado en la misma línea que en Londres. Hemos intentado con nuestro estilo levantar el partido e intentar mantener esa distancia, pero ha sido difícil. Te quedas con un sabor de boca un poco triste", comentó resignadamente Ernesto Valverde.

Si algo ha tenido de positivo el encuentro, más allá del punto sumado, es el buen estado de forma que se ha podido seguir contemplando en el brasileño Arthur. El '8' del Barça sigue convenciendo a su entrenador, que lo define como "un jugador que junta mucho al equipo, nos da posesión y no la pierde. Nosotros necesitamos la posesión para dominar. Nuestro estilo es este."

Los cambios no llegaron hasta la recta final del choque, cuando Dembélé sustituyó a Coutinho (min. 84) y Rafinha, a Arthur (min. 88). Valverde ha admitido que "he guardado los cambios hasta el final porque no lo tenía claro y, si no lo veo claro, prefiero esperar."