Levantarse o morir. No le queda otra al Real Oviedo. Lo que comenzó siendo una temporada ilusionante se ha convertido en una pesadilla para el aficionado azul.
12 puntos de 27 posibles. Poco para un equipo que aspira a encabezar la clasificación. Pero lo que más malestar provoca en el aficionado es dejarse puntos contra equipos recién ascendidos. Primero fue con el Extremadura, después llegó el Elche y por último el Rayo Majadahonda. Eso duele en el corazón carbayón.
El conjunto de Anquela debe revertir la situación. Cada partido se deberá enfrentar como si de una final se tratase, y el primer finalista será el Osasuna, el estadio el Carlos Tartiere y el día el domingo a las 16:00.
Osasuna es un club que de momento ha sido muy irregular. Ha perdido partidos contra Nástic y Cultural Leonesa, y sin embargo ha puntuado contra Zaragoza, Cádiz y Real Sporting.
El club navarro llega con 3 victorias, 3 empates y 3 derrotas, los mismos números que el club azul. Los rojillos no conocen la victoria como visitante. Ocupan el puesto 12 de la clasificación, el mismo que el asturiano. Con un gol menos a favor y cuatro menos en contra que el conjunto asturiano, el choque se prevé muy disputado.
El juego que despliegan los navarros consiste en aprovechar las bandas, sobre todo la de Juan Villar, que volvió ante el partido contra el Córdoba e incluso anotó uno de los goles del conjunto rojillo. Además, cuenta con centrocampistas que explotan el juego físico y que saben mover el balón. Presiona mucho, asfixiando al rival, juntando las líneas a la hora de defender.
En lo que respecta a los jugadores lesionados, Kike Barja ha recibido un golpe en el entrenamiento que le ha obligado a finalizar la sesión antes de tiempo. Se une a las dudas de Iñigo Pérez y Sergio Herrera, que continúan con su proceso de recuperación. Por el contrario, Javi Martínez ha realizado trabajo completo con el grupo.