Vallecas vivió su primer derbi madrileño de la temporada, en el cual el conjunto franjirrojo terminó el encuentro con sabor amargo a pesar de luchar por hacerse con el encuentro.

A pesar de ello, en el partido hubo muchos parones por faltas realizadas por ambos equipos madrileños. Pero sobretodo fue en la segunda parte donde se vieron más parones en el encuentro por esa razón.

El colegiado no se frenó en mostrar cartulinas amarillas a los jugadores cuando realizaban algunas de las faltas, con un total de diez cartulinas amarillas, la mayoría de ellas en los últimos quince minutos del encuentro. En el tiempo añadido, incluso Óscar Trejo vio la doble amarilla y la única cartulina roja que hubo en el choque, provocando que se perderá el duelo contra el Athletic de Bilbao.

Por lo que en el derbi se vivió con muchas faltas por partes de ambos equipos a lo largo del encuentro, pero destacó más en el segundo tiempo. Un hecho hizo ver que era un partido importante y que los puntos en juego eran imprescindibles, tanto para el conjunto local como para los visitantes.

No obstante, fue un partido lleno de contratiempos, ya que parecía que llovían las faltas en el Estadio de Vallecas. Un factor que también afectaba en el juego para acercarse a las áreas rivales en la búsqueda del gol.

A pesar de ello, el equipo local terminó con un hombre menos tras la expulsión del argentino y con una nueva derrota en su casa, en donde ha disputado cuatro encuentros y solamente sacó un punto ante el empate del Espanyol.

Junto a ello, el gol en propia puerta de Sergio Akieme también fue un golpe duro para los hombres de Míchel. Aun así seguirán trabajando para empezar a ver buenos resultados en su vuelta a la máxima competición del fútbol español.

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