El Sporting de Gijón sufre una sequía de victorias en LaLiga1|2|3 desde el 29 de septiembre. Su último triunfo, ese día, fue contra Las Palmas. Es curioso, pues en ese momento, era el club que se estaba disputando el liderato junto al Málaga. El siguiente rival de los de Baraja también pelea por el liderato en estas jornadas.

Los de Muñiz vienen de perder fuera de casa contra el Osasuna. Un partido que los malaguistas esperaban ganar, pero que se torció tras una expulsión. Los de Martiricos vuelven a jugar fuera de casa para enfrentarse a un Sporting con hambre de victoria. Baraja puede aprovechar el nerviosismo malaguista para sorprender.

Bien es cierto que hace poco más de una semana, el Sporting doblegó al Eibar, pero este resultado se produjo en Copa del Rey. En liga, los de Baraja necesitan sumar tres puntos. El club ha aguantado en la zona media de la tabla sirviéndose de empates que han ido añadiendo puntos al casillero, pero hace mucho que no suman de tres en tres.

El partido se jugará en El Molinón, con la consiguiente presión de la grada sportinguista. La unión de factores está a favor de los de Baraja: el hambre de victoria, la reciente derrota fuera de casa del Málaga, la condición de local... La asignatura pendiente es el gol, pues al Sporting le cuesta marcar más de uno en liga.

Para ello, Carmona estará en pie de guerra. El centrocampista es el máximo goleador del equipo, con tres tantos. Lleva muchos años en el Sporting y su actuación será clave para evitar a los malaguistas. A estos ya se les conoce por su juego: el estilo Muñiz es cuidadoso, y espera al fallo del rival para atacar.

Al Málaga no le importa entregar la pelota al rival para esperar su oportunidad. La clave está en saber aprovechar esa posesión que los de Muñiz entregan, y en colocar una defensa férrea que no permita a los de Martiricos montar sus contras, que tanto daño han hecho.

Otro aspecto es parar a Leschuk. El argentino es el máximo goleador malaguista, con seis tantos, y está en forma. También será necesario estar atentos a balón parado para evitar que el delantero pueda encajar gol. En definitiva, las dos claves son aprovechar la posesión que el Málaga, seguro, entregará, y estar atentos a las contras; especialmente a Leschuk.

Se trata de otro partido en el que los de Muñiz deben dar un golpe sobre la mesa; tras la derrota contra el Osasuna y la pérdida del liderato, los de Martiricos están ansiosos por volver a lo alto de la tabla y mostrar por qué llevaban ahí tantas jornadas. El Sporting, hambriento de victorias, sabe lo que tiene que hacer para vencer al exlíder, y lo pondrá en práctica.