El CD Tenerife recibía al Albacete Balompié en un momento delicado tanto en lo deportivo como en lo institucional, cuestionándose el juego del equipo, así como la efectividad en la constitución de la plantilla; atrás ya quedaba la cuestión de si había sido falta o gol legal el primer encajado por Dani Hernández frente al CD Numancia y que tanto debate generó durante la semana.

En el ambiente se recordaba al malogrado delantero Panameño Rómel Fernández, ex jugador de ambos conjuntos y que tantas alegrías dio al cuadro insular. No en vano, un mural con su figura decora las inmediaciones de la puerta principal del Heliodoro Rodríguez López.

Movía tecla José Luis Oltra pasando de la acostumbrada y no menos cuestionada defensa de cinco, para pasar a la de cuatro, obviamente buscando un jugo más ofensivo dotando de más delanteros al sistema, con Camille y Luis Pérez en los laterales, y línea de dos centrales fijada por Alberto y Jorge Sanz. Por delante, sin cambios, con el ya usual triángulo formado por Iker Undabarrena-Luis Milla–Brian Acosta,  Suso en banda y Malbasic con Nano en la definición. En la portería, Dani Hernández.

Arrancaba el partido con un CD Tenerife más compacto, pero sin claridad ni calidad en la definición. Así, rozando la media hora de juego lo tuvo cerca primero Nano y luego desde lejos Luis Pérez y Undabarrena más tarde; después a balón parado sería Luis Milla, cuyo disparo se marchó cerca de la escuadra. El balón circulaba saliendo bien desde la pareja de centrales Alberto-Jorge Sanz, pero como siempre, falta arriba la tan ansiada finalización.

La segunda mitad arrancaba con un cabezazo certero de Filip Malbasic, que se marchaba fuera por poco. Diez minutos más tarde, en el 57, nuevamente Malbasic estaba cerca de ver puerta en una buena asociación con Nano. Y en el minuto 61, nuevamente Malbasic se ve frenado por una buena intervención de Nadal, en lo que pudo suponer el 1-0. Acto seguido es el meta hispano-venezolano del club chicharrero Dani Hernández el que evita el gol visitante en un doble ocasión.

En el 63 Suso dejó su lugar a Joao y algo más tarde, en el 69, es Naranjo el que reemplaza a Brian Acosta, buscando más frescura; los cambios casi calcados de los últimos encuentros. En el minuto 84, el técnico local agotó los cambios dando entrada al zurdo Tyron en sustitución de Nano.

El Tenerife quiere pero no puede; ahora apurando los últimos momentos fue el central Jorge Sanz el que remató al palo. A los locales le cuesta hacer gol, no hay duda. Y fue  Zozulya el que devolvió un balón al poste tinerfeño. La gente comenzó a dirigirse al palco institucional pidiendo responsabilidades y dimisiones.

Terminó el encuentro y más de lo mismo, el Tenerife sigue sin convencer. La línea defensiva y centro del campo, muy decente, pero falta absoluta de ejecución y definición en el ataque. Para algunos, el empate que pudo ser victoria y para otros, el que pudo ser derrota.

El técnico José Luis Oltra sigue sin dar con esa ansiada y buscada tecla que le haga ganar los partidos y sobretodo convencer, les falta fútbol, ambición y como dice el propio técnico, competir. La siguiente jornada el cuadro chicharrero visitará Pamplona aguantado con alfileres. En rueda de prensa, el técnico valenciano se quejó del excesivo castigo por no ganar, pero contento esta vez con sus jugadores por haberlo dado todo, aunque insatisfecho por no vencer.

Esta semana se salvan por poco de los puestos de descenso.