Como suele ser habitual por estas fechas, la actividad liguera se va a ver afectada por el parón de selecciones perteneciente a la UEFA Nations Cup. El Eibar,  como la mayoría de equipos de las principales ligas europeas, ya está sufriendo las consecuencias.

Con el objetivo que mantener el nivel de cara al duelo frente al Real Madrid, el Eibar ya ha acordado un choque frente a un rival de la Liga Santander, la SD Huesca. Ambos equipos se verán las caras por segunda vez este año, después del duelo que se disputó en Ipurua a principios de Liga. En ese encuentro, los oscense salieron victoriosos del feudo armero, consiguiendo la primera victoria del conjunto en Primera División.

Si bien es cierto que el resultado no es lo más importante en este tipo de partidos, los de Mendilibar no quieren repetir no lo ocurrido en la primera jornada de Liga. Por parte del equipo guipuzcoano se esperan numerosas novedades en el once inicial. Una de las más esperadas, es sin duda la vuelta a los terrenos de juego de los menos habituales.

Dmitrovic no está recuperado

El serbio, hombre clave para los intereses armeros, se ha visto envuelto en  otra lesión muscular. El guardameta ha vuelto a resentirse de una pubalgia que sufre desde que comenzó la temporada y todo parece indicar que el equipo armero se plantea recuperar a Yoel, jugador cedido en el Valladolid. El club armero está a la espera de conocer el alcance final de la lesión de Marko Dmitrovic, que puede llegar a pasar por el quirófano para ser tratado de su pubalgia.

Este partido puede ser un regalo muy especial para Mendilibar. El técnico de Zaldivar cumplió 182 encuentros al frente del equipo armero en el duelo frente al Valladolid y no hay mejor regalo que una buena victoria, aunque no sirva para mucho.