El Rayo Vallecano tenía marcado el compromiso del 30 de noviembre con color rojo en el calendario, y no es para menos. Llevaban desde mediados de septiembre sin conocer la victoria y los puestos de descenso comenzaban a ahogar a un equipo que prometía mucho por su juego, pero no materializaba ocasiones y perdía muchos puntos en los últimos minutos. Pero las tornas cambiaron, y un todopoderoso Eibar cayó al no tener la eficacia deseada de cara a portería, pero la sólida defensa rayista estaba siendo una pesadilla para los atacantes.

Álex Moreno y Orellana, protagonista de la acción más polémica del encuentro

Uno de los mejores duelos individuales del partido se produjo entre Álex Moreno y Fabián Orellana. El lateral izquierdo tenía la difícil tarea de detener las internadas por banda del extremo chileno, una tarea que cumplió a la perfección, y además sin descuidar la faceta ofensiva. Precisamente de una jugada individual suya llegó el único gol del encuentro tras un centro ofrecido a Embarba desde el flanco izquierdo para que solo tuviera que empujar el esférico.

Pero este apasionante choque de jugones, también proporcionó el momento más tenso del partido. Corría el minuto 79 cuando Álex Moreno cortó un contragolpe que conducía Orellana. El extremo, que no reaccionó bien a la acción defensiva del catalán, propinó un codazo al defensor. A pesar de las protestas de la grada, el que se llevó la cartulina amarilla fue el jugador del Rayo Vallecano.

Álex Moreno y Orellana luchando por un balón | Fotografía: La Liga
Álex Moreno y Orellana luchando por un balón | Fotografía: La Liga

Una jugada que dará mucho que hablar en Vallecas, ya que los suyos estarán en contra de que la tarjeta amarilla la viera Álex Moreno, y no Orellana, que sacó el brazo a pasear en una acción que no hubiera sido necesario. Aun así, este incidente entre los jugadores no varió el resultado, ya que el Rayo Vallecano logró la primera victoria en casa de la temporada y los armeros no fueron capaces de sumar tres puntos más.