Madrid acogerá la final de la Copa Libertadores, que se disputará el próximo domingo nueve de diciembre, prácticamente a la vez que el Rayo Vallecano estará en el Benito Villamarín tratando de conseguir tres puntos vitales para el objetivo. Pero en este acontecimiento histórico, está presente River Plate, equipo que comparte vestimenta con el equipo madrileño. Y no solo eso, ambos conjuntos tienen historia común desde hace años.
Rayo y River, unidos por una franja
Tal y como recuerda AS, el equipo que se fundó en 1924, comenzó jugando con una camiseta blanca. Pero en 1948, por apuros económicos, entabló conversaciones con el Atlético de Madrid para hacer un convenio de colaboración y le cedió jugadores a cambio de que dejara de vestirse igual que el Real Madrid y en su equipación hiciera algún guiño al conjunto rojiblanco. La decisión que tomó la directiva del Rayo, fue la de incluir en su camiseta una franja roja similar a la de River Plate en su honor.
El hermanamiento definitivo entre River y Rayo se produjo en 1953, con una visita de los argentinos a Madrid para disputar un partido en el Bernabéu. Los dirigentes del equipo vallecano obsequiaron a los visitantes con una foto firmada de la plantilla y ellos respondieron regalando dos juegos de sus equipaciones compuestas por camisetas, pantalones, medias y botas. Volvieron a coincidir en 1978 en el Torneo Villa de Madrid, que reunió en la capital española al Derbi Country, Atlético de Madrid y los conjuntos hermanados.
Además, hay varios futbolistas que han militado en ambos equipos, como sería el caso del central Horacio Ameli (1996-98), el centrocampista Bruno Zuculini (2016) y, sobre todo, el delantero Chori Domínguez (2012-13 y 2017-18). Este último, además de ayudar en el último ascenso, es uno de los mejor recordados entre el rayismo, ya que siempre ha tenido muy buena relación con la grada y se ha dejado todo en el campo por la camiseta, además de mostrar en multitud de ocasiones su amor por club.