Andrés Guardado es una de las piezas clave de los esquemas de Quique Setién. El técnico cántabro solo tendrá su baja para recibir al Rayo Vallecano, y tendrá al resto del equipo disponible. En el último encuentro que disputó el mexicano, frente a la Real Sociedad, tuvo que abandonar el terreno de juego cuando marchaba el minuto 15. Unas molestias que ya le tuvieron apartado en el duelo de Copa del Rey, y que probablemente le tendrán fuera de los terrenos de juego durante un mes.
Guardado, baja sensible para el Betis
Todo comenzó cuando el centrocampista fue a buscar un balón a la banda izquierda, y después de la acción se echó mano a la pierna al sufrir un pinchazo muscular. El futbolista, tal y como ha desvelado el Betis, sufre una rotura de grado II de la musculatura isquiotibial medial distal de su pierna izquierda. Su sustituto frente a la Real Sociedad fue Boudebouz, algo que podría volverse a repetir.
El mexicano, de 32 años de edad, es uno de los jugadores que más espectáculo ofrece sobre el terreno de juego del Betis. Su control del balón y de las situaciones podrían ser el mejor arma de los verdiblancos frente a los madrileños, que tienen la sala de máquinas un tanto debilitada.
Hasta el momento, el ex de Deportivo de la Coruña y Valencia, entre otros, ha disputado 816 minutos repartidos en 11 partidos esta campaña. Ha visto dos tarjetas amarillas, pero también ha dado dos asistencias y se ha atrevido a probar el disparo en seis ocasiones, aunque sin fortuna. Ha salido victorioso en 11 regates y ha recuperado 52 balones. En cuanto a su mejor faceta, la de distribución del esférico, ha dado 556 pases buenos a sus compañeros, ha puesto ocho centros y ha sido capaz de ganar 75 duelos. Un valor seguro que, sin duda, se notará su falta frente al Rayo.