El encuentro de este sábado será algo más que un simple partido de fútbol. Hacía más de diez años, concretamente 13, que ambos conjuntos no se enfrentaban en un partido oficial. En aquella ocasión, la escuadra coruñesa se impuso por 1-0 a unos amarillos que, esa misma temporada, acabarían descendiendo a Segunda División. Desde entonces, ni amarillos ni blanquiazules han vuelto a disputar un partido oficial. Pero sí uno de pretemporada.

Este se dio en la 55ª Edición del Trofeo Carranza. En esta edición del trofeo -que, finalmente, acabaría llevándoselo el Sevilla FC-, el azar decidió emparejar al equipo gaditano con el gallego. La diferencia entre ambos equipos, sin embargo, era abismal. Por un lado, el Cádiz llegó al choque como recién ascendido. El conjunto dirigido por aquel entonces por Javi Gracia se encontraba inmerso en pleno momento de reconstrucción de plantilla. Aun así, el Carranza pudo ver en directo a algunos de los fichajes, como fueron Dani o, el más aclamado por la afición gaditana, Diego Tristán.

Por su parte, el Deportivo, aquel año, contó con un equipo digno de UEFA. Jugadores como Aranzubia, Manuel Pablo, Colotto, Valerón o Bodipo salieron de inicio y no defraudaron. Vaya si no lo hicieron. Pese al tanto inicial de Toedli, los de Lotina voltearon el marcador en apenas tres minutos. Primero Sergio, de penalti, igualaría el choque. Luego, en el 33, Bodipo culminaría una excelente combinación en ataque y pondría el 1-2 en el electrónico. En la segunda parte, los pupilos de Gracia tratarían de igualar el encuentro, pero no sería posible. Un gol de Mista en el último minuto del partido acabaría deshaciendo todo intento de remontada amarilla. En la siguiente ronda, los deportivistas acabarían cediendo contra el Sevilla, quien se acabaría haciendo con el trofeo, y los andaluces lograrían el tercer puesto en un partido muy igualado contra el Valencia.

Actualmente, ambas escuadras llegan en un momento muy similar. Los dos equipos se encuentran inmersos en la lucha por el ascenso y ninguno se desmarca como favorito para ganar el partido. Eso sí, el encuentro, pase lo que pase después, va a ser una fiesta tanto para gaditanos como para gallegos.