El Rayo Vallecano, después de haber conseguido una victoria muy necesitada para la escuadra de Vallecas, se encuentra descansando y reponiendo fuerzas en una semana que también les servirá para descansar. Ha sido un año con muchos altibajos y los jugadores necesitan parar y digerir todo lo que ha ocurrido en un período muy convulso, ya que han pasado de ser campeones de la categoría de plata por primera vez en su historia a estar sumidos en el descenso de Primera División.

30 de diciembre, vuelta al trabajo

Pero los pupilos de Míchel no podrán olvidarse en exceso del deporte rey, ya que a la vuelta de estas pequeñas vacaciones tienen un duelo que ya lo han vivido la temporada anterior en Segunda División. Visitan al Real Valladolid en el José Zorrilla, donde el pasado cuatro de marzo hubo reparto de puntos tras anotar un gol cada conjunto. Para los de Vallecas el goleador fue Raúl de Tomás desde los once metros, mientras que los blanquivioletas fueron los primeros en adelantarse en el marcador también desde el punto de penalti, una pena máxima que transformó el ahora jugador del Gefate, Jaime Mata.

Para preparar este duelo, los madrileños volverán al trabajo el domingo 30 de diciembre, y lo harán con doble sesión. El escenario donde se ejercitarán a las 11:00 y a las 17:00 horas será la Ciudad Deportiva, a donde seguramente se acercan muchos pequeños con sus respectivos padres para volver a ver a los jugadores de su equipo.

Los blanquivioletas llegan a la cita tras haber logrado un empate fuera de casa frente al Athletic Club, otro de los equipos que se encuentra en la zona de peligro. Pero el Rayo, a pesar de llegar a Valladolid después de haber conseguido la segunda victoria consecutiva en su feudo, no debe fiarse. El fin de semana de Reyes a veces puede traer regalos envenenados, como ocurrió la pasada campaña frente al Nàstic de Tarragona en Vallecas.