El Barcelona accedió el pasado jueves a los cuartos de final de Copa del Rey tras doblegar por 3-0 al Levante en la vuelta de los octavos. Inmersos en la polémica de Chumi, los de Valverde se centraron en el juego sobre el verde y con el doblete de Dembélé y el solitario gol de Messi consiguieron su plaza en el sorteo de la siguiente fase.

Este viernes, desde la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), los azulgranas quedaron emparejados con el Sevilla, uno de los rivales más complicados con el que se podían cruzar. Así pues, el Barça arrancará su andadura por los cuartos en el Ramón Sánchez Pizjuán.

Será el próximo miércoles 23 de enero a las 21:30h, como se dio a conocer tras el sorteo. El encargado de poner paz entre ambos conjuntos será Carlos del Cerro Grande, del comité madrileño de competición.

Semana de duro trabajo en Can Barça

Los azulgranas tienen por delante una semana frenética de trabajo. Este domingo recibirán al Leganés en el Camp Nou para dar inicio a la segunda vuelta de la Liga Santander, pero los madrileños fueron uno de los dos únicos equipos capaces de ganar al líder en esta edición del trofeo regular.

Tras el partido en el estadio, la expedición azulgrana pondrá rumbo a Sevilla para disputar la ida de los cuartos de final en el Sánchez Pizjuán, en un siempre complicado cara a cara con los andaluces. Tras volver a la Ciudad Condal, la Liga seguirá siendo la prioridad para Valverde y, con un corto desplazamiento, jugarán en Montilivi la 21ª jornada en el derbi catalán ante el Girona.

Con la Liga arrinconada, toda la atención pasará por recibir en casa al Sevilla y certificar quién es el elegido para pasar a las semifinales de Copa del Rey. Los azulgranas quieren seguir peleando por los tres títulos que hay en juego y no quieren regalar la Copa sin disputarla hasta el último momento.