El Sporting de Gijón venció al Alcorcón por 2-0, con goles de Djurdjevic y Lod en el Estadio El Molinón - Enrique Castro Quini. Los madrileños suman siete jornadas sin ganar y están sumergidos en una profunda crisis de resultados.

El Alcorcón llegó tarde

Algunos aficionados no habían llegado aún a su asiento cuando el conjunto local abría la lata. Un balón en diagonal del finlandés Lod a la espalda de David Fernández dejaba totalmente sólo a Djurdjevic que batía a Dani Jiménez con suspense en el primer minuto de partido. El Alcorcón había saltado dormido a El Molinón, todo lo contrario que su rival, que en el minuto cinco volvía a tener una clara ocasión en botas de Álvaro Jiménez que disparaba con potencia buscando el segundo gol para los asturianos, pero Dani Jiménez atrapó seguro en dos tiempos.

Tras los primeros diez minutos de asedio local, el equipo madrileño se encontró en el campo, y quiso reaccionar lo antes posible. Juan Muñoz, que arrastra una gran sequía goleadora, lo intentó con un disparo desde la frontal que no puso en muchos apuros a Mariño.

Sobre la media hora de juego, se produjo una de las acciones más polémicas del partido. Juan Muñoz perforaba la porteria rojiblanca para empatar el partido, pero el colegiado anuló la jugada por un más que dudoso fuera de juego. 

Finalizaba así una primera parte en la que el Sporting de Gijón aprovechó a la perfección la falta de concentración alfarera. Por su parte, el Alcorcón intentó revertir el varapalo cuanto antes, pero no estuvo acertado ni en la elaboración ni en la finalización de las jugadas.

Repetición de errores

Dicen que de los errores se aprende, pero el Alcorcón volvería a tropezar con la misma piedra al inicio del segundo tiempo. El Sporting de Gijón montaba una jugada desde la banda izquierda que acabaría con un centro hacía la cabeza de Bellvís, que en un mal despeje estrellaba el balón en el palo, y la pelota caía rechazada en botas de Lod que conseguía batir a Dani Jiménez por segunda vez.

Los alfareros pese a sus dos concesiones no le perdieron la cara al encuentro, y tuvieron alguna jugada peligrosa para recortar distancias. Cerca de la hora de juego, Nono recibía un balón dentro del área que quiso definir al palo largo, pero Mariño realizó una fantástica intervención. Cinco minutos más tarde, tras un error del equipo local, avanzaban Dorca y Juan Muñoz sólos contra la portería rival, pero no hubo entendimiento entre ambos, y la ocasión acabó desperdiciada.

Ya en el último minuto de partido se producía otra jugada polémica. Víctor Casadesús era claramente derribado en el área asturiana, pero el árbitro no lo consideró suficiente. El partido finalizaba con victoria para los rojiblancos, en un partido sin demasiadas ocasiones de gol, marcado por los despistes defensivos del conjunto de Cristóbal Parralo, que ya encadena siete jornadas consecutivas sin ganar.