El reencuentro de Diego Martínez con Osasuna se antoja complicado para los intereses del conjunto rojiblanco. El Granada CF visita el Sadar con el objetivo de mejorar sus números en la ciudad navarra, en la que solo ha ganado dos veces. En el precedente más cercano, ambos conjuntos empataron a cero el curso pasado. La temporada anterior, en la que tanto Osasuna como Granada perdieron la categoría, los rojillos salieron victoriosos de un encuentro sin trascendencia en la penúltima jornada de liga, con ambos equipos ya descendidos.

Dos triunfos consecutivos

El Granada solo ha conseguido vencer dos veces en Pamplona, pero lo hizo de manera consecutiva. En las temporadas 12-13 y 13-14, los rojiblancos calcaron los encuentros y se llevaron los tres puntos del feudo rojillo gracias a dos partidos que acabaron con el mismo marcador, uno a dos favorable a los andaluces. Dos triunfos que son la nota positiva de once partidos disputados entre ambos en la comunidad navarra. En la máxima categoría, aparte de los tres antecedentes ya mencionados, Osasuna ha vencido cuatro choques más ante el Granada.

Si tenemos en cuenta los compromisos en la división de plata, Osasuna sigue saliendo favorecido. Los navarros han vencido en tres de los cuatro compromisos entre ambos en Segunda. En el encuentro restante, Osasuna y Granada se repartieron los puntos al empatar. El precedente restante corresponde a un choque copero. En él, Osasuna superó al Granada por 2-0 en la temporada 16-17 remontando de esta manera el 1-0 del Granada en la ida.

Osasuna, el mejor local de la liga

Si el reto de los de Diego Martínez se antoja complicado por los precedentes mencionados, todavía es más mayúsculo si tenemos en cuenta los números de Osasuna como local, casi inmaculados. Los rojillos son el mejor local de la categoría con un balance que asusta, veintinueve puntos de treinta y tres posibles. Nueve victorias, dos empates y ninguna derrota. Enfrente, el mejor visitante de la liga, con diecinueve puntos de treinta y tres posibles. Todo un choque de altos vuelos el que se vivirá el próximo domingo en el Sadar.