Una vida difícil, pero ilusionante la que tiene por delante Marcelino García Toral; con el gran reto del torneo del K.O. y la posibilidad que baraja entre sus manos de dar un paso al frente en Liga por posicionarse seriamente en Europa, el técnico afronta lo que resta de temporada con las pilas cargadas.

Cuatro partidos seguidos sin perder son los que han hecho que los de Valencia estén en la zona media alta de la tabla; la Liga está más igualada que nunca, y tanto una pequeña buena racha, como una mala puede ser determinante. Dos victorias y dos empates son los que ha sumado el Valencia CF desde que cayera derrotado en el Estadio del Alavés por 2-1

Los de Marcelino García Toral llegan al choque de Liga con la moral por las nubes, tras haber cosechado un excelente resultado el pasado jueves en el Estadio del Real Betis Balompié, en el Benito Villamarín. Los chés deberán empatar o ganar para volver al Estadio bético, esta vez para disputar la final de la Copa del Rey 2018/2019. No cualquier empate satisface las necesidades del Valencia, pero hasta un empate a dos tantos los llevaría a la prórroga, pues en la ida consiguieron dicho resultado.

El partido comenzó igualado en cuanto al resultado se refiere, pues hasta el minuto 45 de partido no se pudo ver tanto alguno. En ese preciso instante sería cuando el delantero español, y canterano bético Loren Morón, mandara el esférico al fondo de la red. Posteriormente, sería Joaquín quien ampliara diferencias en el minuto 54 de partido. Todo el esfuerzo y ventaja del Betis no serviría para mucho, pues primero el ruso Cheryshev y posteriormente Kevin Gameiro, igualarían el choque dejando todo abierto para la vuelta en Mestalla. Eso sí, los chés parten con ventaja, debido al valor doble de los goles fuera de casa.

Así, una semana difícil pero ilusionante la que se está viviendo en los corazones de los aficionados valencianistas, que hoy por hoy optan a todo, tanto a la Liga como a la Copa del Rey.