Corría el mes de septiembre del año 2005. Un joven camero, que apenas contaba diecinueve primaveras, estaba a punto de cumplir un sueño. Tras dos temporadas con el primer equipo del Sevilla, fueron muchos los clubes que se percataron de su talento. Ese chico de look desenfrenado, que poco asemeja al que luce hoy en día, tenía algo distinto por lo que merecía la pena apostar. Y el Real Madrid, especialista en sondeos de mercado, no dudó ni un solo segundo. Todo al rojo.

Florentino Pérez, que disfrutaba de su segundo mandato al mando de la nave blanca, se puso en contacto con el Sevilla para abordar su fichaje. Sin embargo, desde Metrópolis se mostraban reacios a negociar. Era una de las jóvenes promesas del equipo y no estaban dispuestos a renunciar a ella. Durante las últimas semanas de agosto se produjeron múltiples llamadas en busca de un acuerdo, siempre con el 'no' por delante del equipo presidido entonces por José María Del Nido. 

La famosa cláusula 

Viendo que iba a ser imposible llegar a un acuerdo con el Sevilla, el Real Madrid decidió pagar su cláusula de recisión para que el joven, de tan solo diecinueve años, aterrizase en el Bernabéu. Eran 27 millones de euros, una cantidad significante para la fecha, lo que el hermano del futbolista y su representante llevaron a la sede de la Liga para que Sergio Ramos se convirtiera en nuevo jugador del Real Madrid. Fue en el último día de mercado, en una operación costosa hasta el último momento, pero que acabó llegando a buen puerto. No hace falta más que ver su currículum.

El sevillano se abraza con sus compañeros. Foto: UEFA.com
El sevillano se abraza con sus compañeros. Foto: UEFA.com

Sin embargo, desde la capital andaluza no se tomaron nada bien las formas en las que 'el hijo de la Paqui' -como le conocían en su ciudad natal- había fichado por el conjunto merengue. El propio Del Nido se mostró inconforme y, desde entonces, la relación entre clubes y aficionados nunca ha vuelto a ser la misma. Perdieron a un diamante en bruto, que después se acabaría puliendo en otra capital, la de España. Aún así, cada vez que le toca regresar al Pizjuán, el futbolista muestra un respeto absoluto por el club que le lanzó al estrellato.

Catorce años después

Mucho ha llovido desde entonces, pero la historia se repite cada vez que el camero vuelve a la que fue su casa. A pesar de que ya han pasado más de catorce años, y que Sergio Ramos se ha convertido en todo un emblema del madridismo. Es el capitán - será recordado como uno de los más laureados de la historia- y ante el Ajax disputa su partido número seiscientos como jugador del Real Madrid. Simplemente histórico.

Ramos levanta la 'Decimotercera'. Foto: UEFA.com
Ramos levanta la 'Decimotercera'. Foto: UEFA.com

Una hazaña que no está al alcance de cualquiera. Solo le superan Hierro, Gento, Santillana, Sanchís, Casillas y Raúl González, pero que si todo sigue según lo previsto, conseguirá liderar esta lista algún día. En el Amsterdam Arena, dónde su equipo consiguió la Séptima Copa de Europa, Sergio Ramos cumple un sueño que, cuando llegó aquel primer día de septiembre del año 2005, nunca podría haber imaginado. Catorce primaveras, capitán y seiscientos partidos defendiendo la camiseta del club más laureado de la historia. Si es un sueño, no lo despierten.

VAVEL Logo