El Comité de Disciplina de la UEFA ha abierto una investigación por la tarjeta amarilla a Sergio Ramos durante el encuentro en Ámsterdam. El defensa andaluz vio la cartulina en la segunda parte ante el Ajax y se perderá, como mínimo, el partido de vuelta de octavos de final en el Santiago Bernabéu. La principal amenaza para el Real Madrid es la posible sanción de dos partidos, que le impediría jugar la ida de cuartos de final en caso de clasificarse.

Sus declaraciones posteriores al partido en zona mixta le delataron. En los últimos años se ha visto como la UEFA castiga duramente a los jugadores que fuerzan voluntariamente la tarjeta amarilla que les impide estar en el próximo encuentro, de forma que limpian su historial y se aseguran estar presentes en los partidos más complejos. Además de reconocerlo ante los micrófonos, han salido imágenes en las que el capitán madridista pregunta al banquillo si buscaba la amonestación.

Tras todo el revuelo formado alrededor de esta situación, Sergio Ramos se manifestó a través de Twitter donde declaró no haber forzado esa tarjeta y que lo peor de todo es “no poder estar en la vuelta” junto a sus compañeros. A la mañana siguiente la UEFA anunció en un comunicado La UEFA que ha iniciado una “investigación disciplinaria basada en el artículo 31 (3) del Reglamento Disciplinario de la UEFA en relación con las declaraciones del jugador del Real Madrid Sergio Ramos”.

La peor noticia tanto para el jugador como para su equipo sería la sanción de dos partidos, uno por la doble amarilla y otro por buscar dicha sanción cuando su equipo marchaba con un marcador favorable en la eliminatoria. Ya ocurrió con Carvajal y ahora puede ser Sergio Ramos el perjudicado. En cuestión de días se resolverá este tema y se dará a conocer los partidos en los que Solari no podrá contar con su máximo referente en la zaga.

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