El Barcelona ha reaparecido en el Camp Nou tras una semana sin fútbol y con tiempo para descansar y recuperar aquellos jugadores que más minutos llevan acumulados. Lo ha hecho en casa recibiendo al Real Valladolid, uno de los nuevos ascendidos a la categoría y que llegaba con Masip en la portería, un conocido entre la afición culé.

Valverde ha apostado por dejar en el banquillo a Lenglet y Rakitic, ambos con cuatro cartulinas amarillas y al borde de la suspensión, igual que a Luis Suárez, que podía descansar en un principio. Sí ha vuelto Jordi Alba, que no viajó a San Mamés cumpliendo la sanción y Dembélé, que parece haber superado ya su lesión y requería minutos de cara al próximo encuentro de Champions League.

Los azulgranas salían al césped a sabiendas que no podían permitirse un nuevo tropiezo y es que tras los empates ante Valencia y Athletic Club en Liga, el Real Madrid (segundo clasificado) ya se ha situado a seis puntos, recortando distancias de los diez iniciales. Aunque el Barcelona es líder en solitario, tener una leve ventaja en la tabla siempre da tranquilidad al vestuario, que quiere seguir sumando de tres en tres.

Messi sale al rescate gracias a Piqué

Prácticamente cinco minutos le han faltado a los azulgranas para entrar en el juego, regalando la posesión a los violetas en los compases iniciales del partido. Boateng ha tenido la primera oportunidad por la banda derecha, pero Masip ha detenido la esférica sin problema alguno.

Piqué fuerza un penal a favor para que Messi abra el partido

Antes de los veinte minutos lo han vuelto a intentar los locales, cuando Messi acolaba en la banda la mayoría de defensores dejando a Dembélé sólo al borde del área, aunque el delantero francés no ha disparado correctamente ante portería y el primer gol empezaba a resistirse. Pese a acciones puntuales, el juego del Barcelona no estaba convenciendo en estos primeros minutos de partido, teniendo a Messi en el foco de todas las jugadas y con pérdidas reiteradas de posesión que hacían desquiciar a Valverde, que observaba el juego desde el área técnica.

Poco antes del descanso, y mientras el Valladolid empezaba a creerse capaz de plantar cara al vigente campeón, Messi ha tenido el gol en sus botas al rematar desde el balcón del área un balón ajustado al palo. Los de Sergio González también lo intentaban ante Ter Stegen, aunque no acababa de llegar el último remate. En la siguiente jugada, Piqué ha caído dentro del área y el colegiado ha señalado la pena máxima a favor de los azulgranas. El '10' del Barça, infalible ante su ex-compañero, ha movido el marcador.

Boateng no convence en el Camp Nou

A pocos segundos de haber reprendido el juego Valverde ya ha ordenado movimientos en el banquillo, haciendo calentar a Suárez, Coutinho y Rakitic en la banda. Mientras, en el terreno de juego, Messi ha vuelto a poner la miel en los labios al rematar ante la portería vallisoletana haciendo lucir a Masip.

Messi y Dembélé en la delantera azulgrana | Foto: Noelia Déniz - VAVEL
Messi y Dembélé en la delantera azulgrana | Foto: Noelia Déniz - VAVEL

Piqué ha iniciado un rápido contraataque llegando a plantarse en zona de tres cuartos pero, pese a que Messi ha creído en la jugada, el disparo final de Boateng ha llegado a segunda gradería. Después volvía a ser el capitán quien intentaba culminar la jugada de Dembélé por la banda derecha, aunque la puntería ha vuelto a detener al goleador. El nuevo fichaje, que en la siguiente jugada volvía a recibir sólo ante Masip, ha desesperado a la afición del estadio, que no entendía los errores constantes del extremo derecho.

El técnico culé no le ha dado más de una hora a Boateng cuando le ha sentado en el banquillo para que entrase Luis Suárez, que se preparaba ya para los octavos de Champions League ante el Olympique de Lyon. En la primera que ha tenido el uruguayo, en solitario ante el guardameta, ha disparado sobre el propio cuerpo del ex-azulgrana, perdonando así una buena oportunidad de cerrar la victoria. Llevado por la rabia, Messi ha vuelto a ver una amonestación por protestar las decisiones de Martínez Munuera.

La frustración regala tres puntos

Mientras Sergio González hacía entrar a Toni retirando a Verde, Coutinho ha sido el segundo cambio escogido por Valverde, que ha retirado a Dembélé del césped, pausando su recuperación física. Segundos más tardes ha sido Carles Aleñá el sustituido, que ha recibido una cálida ovación mientras entraba RakiticToni ha tenido que retirarse tan sólo seis minutos después de entrar en juego fruto de unas molestias físicas.

Masip detiene el segundo penal de Messi

Ya con el centro del campo titular en los de Valverde, Sergi Roberto también ha estado cerca de hacer el segundo. Pocos minutos le quedaban al Barça para aguantar el resultado y conseguir llevarse los tres puntos pero cuando Coutinho entraba al área ha vuelto a forzar el penal que Masip ha detenido a Messi. El argentino sumaba ya su 22º error desde los once metros, pero quería redimirse de la acción y, segundos más tarde, remataba desde fuera del área un balón ajustado a la escuadra, que no ha perforado la portería contraria.

La frustración empezaba a aparecer en el rostro de Messi, pero es que Suárez tampoco mejoraba el estado de la delantera volviendo a fallar un fácil remate. Parecida era la reacción del público ya en tiempo de añadido cuando el 'killer' del área no empujaba entre los tres palos la esférica tras una gran carrera del rosarino. Finalmente, los azulgranas mantienen la victoria en casa y seguirán en lo más alto de la clasificación centrando ya todas sus energías en la competición europea.