“Rodri” llegó tras la destitución de Juan Sabas, el 13 de noviembre de 2018, días después de la derrota sufrida contra el Osasuna, dónde se dejó remontar una ventaja de dos goles. Un balance de tres partidos ganados, cinco encuentros empatados y cinco perdidos han valido a Manuel Franganillo y su equipo directivo para mover ficha y decidir en prescindir de los servicios de “Rodri”.

La etapa de “Rodri” en el banquillo azulgrana se puede resumir en una subida y una bajada que desemboca en la destitución del técnico. Comenzó con muy buenos números, en los dos primeros partidos en el banquillo consiguió dos victorias, a los dos siguientes encuentros también puntuó sacando un punto en casas de Almería y Tenerife. Antes de acabar el año, el equipo a sus órdenes no consiguió puntuar contra Nástic y Zaragoza. Ya en 2019, consiguió la última victoria de su era en el Francisco de la Hera contra el Alcorcón, en la que fue una exhibición de los azulgranas. Tras ese partido el club solo ha conseguido tres puntos en los últimos seis encuentros, empatando contra un rival directo como el Rayo Majadahonda, y perdiendo contra otro rival, el Elche en el día de hoy.

Al llegar a Almendralejo, el técnico dotó al Extremadura de una gran solidez defensiva, cosa que no hemos visto en los últimos partidos. La mala gestión de los cambios ha sido muy recriminada por los aficionados azulgranas, los que en el último partido contra el Rayo Majadahonda, ya expresaron el deseo de la marcha de Rodri, pitando todos sus cambios y al final del encuentro, todo el estado unánime gritando “Rodri vete ya”.

El club ya baraja varias opciones para ocupar el puesto que deja vacante “Rodri” aunque todavía no se sabe de cierto quien será el encargado de tripular la nave azulgrana hacia el objetivo de mantenerse en LaLiga 1|2|3, el que suena con más fuerza es Gerard López.