Cinco semanas le ha costado al Real Oviedo Vetusta volver a saborear el dulce néctar de la victoria, algo difícil de sobrellevar para un equipo que en la primera vuelta realizó una gran campaña, dando las alegrías a los aficionados carbayones que el primer equipo no le daba. Con el cambio de año, cambiaron también las tornas, y mientras los de Anquela firman un inicio espectacular, el filial azul lo está pasando mal, acusando bajas como la de Lolo González, cedido al Extremadura.

Hace ya casi dos semanas, además, a escasas horas del partido del Vetusta en Lezama ante el Bilbao Athletic, se conocía la trágica noticia del fallecimiento de Falo Cortina, padre del capitán del Vetusta Edu Cortina. Este hecho impactó no solo al futbolista, que se volvió a la capital asturiana sin disputar el encuentro, sino a un vestuario que salió totalmente fuera de partido a la ciudad deportiva del Athletic, perdiendo por 4-1 ante el filial vasco, aunque, como dijo el técnico Javi Rozada en la posterior rueda de prensa, el resultado era lo de menos en un día como aquel. 

El pasado domingo, el Vetusta regresaba a El Requexón, donde recibía al Tudelano, equipo que ocupa actualmente plaza de playout, mejor conocida como promoción de descenso, por lo que sobre el papel podía ser un rival asequible para recuperar la confianza. Además, Edu Cortina volvía a la titularidad en un encuentro más que especial para el capitán. Durante la primera mitad, el filial carbayón llevó completamente el peso del encuentro, y en las botas de Ernesto y Borja Sánchez se formó con alguna ocasión de poner el primer tanto en el electrónico, pero el guardameta visitante, Mikel Pagola, estaba realizando un gran encuentro, desbaratando cualquier ocasión de peligro. 

Edu Cortina de vuelta con sus compañeros | Imagen: Real Oviedo
Edu Cortina de vuelta con sus compañeros | Imagen: Real Oviedo

Tras el descanso, los viejos fantasmas volvieron a hacer acto de presencia en el Vetusta, con un gol a los nueve minutos de Toni Gabarre, que ponía contra las cuerdas al conjunto entrenado por Javi Rozada. A partir del tanto, el partido se igualó, con un Tudelano defendiéndose bien y un Vetusta buscando la portería rival sin acierto. Afortunadamente, a trece minutos del final, Ernesto recogió un balón tras un nuevo rechace del portero rival, pero tuvo la calma suficiente para definir cómodamente e igualar la contienda. Apenas cinco minutos después, en el 82, el central Ugarte se hizo fuerte en el interior del área en un saque de esquina para rematar un complicado centro y poner el balón en la escuadra, certificando así la remontada del filial y primera victoria tras cinco jornadas.

Este domingo, a las 5, el filial del Real Oviedo regresará a la acción ante la Gimnástica de Torrelavega, e intentará volver a cosechar un buen resultado, aprovechando el subidón de moral que le habrá dado volver a la victoria.