Pese a las dudas que generó su cesión en el mercado invernal, el ariete rojiblanco no ha parado ni un segundo en dejarse la piel sobre el terreno de juego, demostrando que sí quiere estar aquí.
Álvaro sería titular en un campo donde el Atleti venía arrastrando varias derrotas en temporadas anteriores, donde de los últimos cuatro partidos, los rojiblancos ganarían uno.
Morata tenía las cosas claras, sabía lo que tenía que hacer en todo momento. Un 9 tan referente como él, le hace muy bien a los colchoneros. A la vista está, bajo todos los balones que venían por alto, peleó con cada defensa, y en los primeros treinta minutos tuvo dos ocasiones claras de gol. La primera tras un malententido por parte de los locales, donde el madrileño no pudo marcar, ya que le pilló por sorpresa. La segunda, a centro de Koke, pero Rulli paró muy bien.
Nuestro ariete no se iba a rendir, y en un centro peinado por Godin, apareció el 9, libre de marca para rematar a placer delante del portero Txuri-urdin.
Tres minutos más tarde, una falta sacada por Koke, volvía a ser rematada por el delantero madrileño, donde nada pudo hacer Rulli. El 22 colchonero, lo celebraría posteriormente haciendo el famoso 'arquero'.
La primera parte terminaría con un resultado de 0-2, gracias a los tantos del rojiblanco.
Después del descanso, el Alteti se vio más atrás debido al acoso de la Real Sociedad por intentar revertir la situación. A pesar de ello, el 22 no dejó de bajar balones, mantener la pelota, dar oxígeno al equipo y defender como uno más. En el minuto 70, iba a ser sustituido por Correa.
De esta forma, Morata demuestra poco a poco, paso a paso, que su pasado no importa y que esta aquí para defender la camiseta y el Club como uno más, porque él también siente los colores.