El Nàstic de Tarragona vuelve a ganar después de ocho partidos. Los de Enrique Martín consiguen la victoria en el tiempo añadido (1-0). El partido no dejó muchas ocasiones, pero consiguió poner los pelos de punta tanto a seguidores locales como visitantes.

Primera mitad de partido muy lenta y con pocas ocasiones. Tanto Nàstic como Albacete esperaron atrás de forma sólida e intentaron buscar balones aéreos con el fin de hacer llegar el balón a sus delanteros referencia.

De nuevo Enrique Martín planteó su famoso "3-5-2", la idea fue la misma de siempre: defender en bloque formando una defensa de cinco personas y salir con balones largos a banda que acabarían en centros a sus referencias en ataque. Ramis, entrenador del Albacete, se decantó por un "4-4-2" con Zozulia como referencia ofensiva, un poco más adelantado que Manaj.

El conjunto visitante saltó al campo con la idea de sacar el balón jugado y llevar la batuta del partido, pero los tarraconenses pusieron en apuros al equipo albaceteño y estuvieron a punto de arrebatarles la posesión del balón.

Parecerá mentira, pero apenas tuvo que intervenir Bernabé Barragán en la primera mitad de partido, ya que disparó el Albacete cuatro veces, pero ninguno de sus disparos encontró puerta. Tomeu Nadal sí tuvo que intervenir en un par de ocasiones. Una buena jugada de Pipa a la media hora de partido estuvo a punto de acabar en gol de los locales, Tomeu Nadal supo reaccionar de forma maravillosa al disparo a bocajarro de Luis Suárez.

Zozulia fue probablemente el mejor jugador de la primera mitad por parte del equipo de Ramis. El delantero de Ucrania luchó todos los balones hasta el último suspiro, pero se vio superado claramente por los centrales granas.

Los de Enrique Martín utilizaron como baza principal las bandas. Intentaron aprovechar la velocidad de Pipa y la fuerza y empeño de Abraham para intentar hacer llegar balones a Kanté y Suárez. Ambos delanteros gozaron de ocasiones, pero no materializaron ninguna de ellas.

Abraham apareció de forma intermitente en el partido, tuvo momentos buenos y otros malos. El capitán del conjunto tarraconense erró en la toma de decisiones, debió elegir mejor cuando debía colgar el balón y cuando era mejor retroceder y empezar de nuevo.

A la media parte los de Ramis cambiaron el chip. El conjunto albaceteño empezó a presionar al cuadro local cada vez más arriba, cosa que dificultó la salida de balón a su rival y forzó a los de Enrique a despejar continuamente el balón en situaciones de transición defensa-ataque. Los locales no cambiaron su esquema de juego y salieron al campo con la misma idea que desplegaron a la perfección en la primera mitad.

Las ocasiones no llegaban, pero cuando menos se lo esperaba el Albacete, vieron cómo Noguera "se iba de excursión" y se adentraba en área rival para acabar rematando un centro medido de Pipa. El testarazo del central argentino fue directo a la posición en la que se encontraba Tomeu Nadal, la jugada acabó en nada.

Le costaba llegar al Albacete a portería rival, no lo hizo de forma clara hasta la media hora de la segunda mitad. Una falta lateral servida por Susaeta pudo haber adelantado al conjunto visitante, aunque el balón se marchó cerca del palo izquierdo de la portería de Bernabé. Unos minutos más tarde, Fali estuvo a nada de introducir el esférico en su propia portería. Pese a estas dos últimas ocasiones del Albacete, los tarraconenses seguían acercándose más a portería rival.

A diez minutos del final, Enrique realizó su primer cambio: Sadik. El delantero procedente de la liga de Chipre acabaría consiguiendo el gol que daba la victoria. Cotán fue el segundo cambio de Enrique. Uche gozó con la enésima oportunidad que dio Enrique, pero apenas tuvo tiempo. No arriesgó el entrenador navarro, todos sus cambios fueron ficha por ficha.

Todo parecía indicar que el partido iba a acabar en resultado gafas (0-0), pero no fue así… unas manos dentro del área del Albacete dieron la oportunidad de ponerse por delante al Nàstic con tan solo dos minutos restantes. Sadik convencido se apoderó del balón. El delantero del Nàstic disparó el penalti raso y ajustado a la derecha de Tomeu, el portero no acertó y el gol subió al marcador.

Restaba un minuto de partido y el estadio daba por cerrado el encuentro. Un último centro lateral que acabó en los pies de Zozulia pudo haber significado el gol del empate. El delantero ucraniano, con un gran remate acrobático estuvo a punto de empatar, pero su disparo chocó en el larguero.

Los de Ramis pierden tres puntos importantes en la lucha por la primera plaza, ya que tras esta derrota podrían quedar distanciados a siete puntos de esa primera posición que ocupa Osasuna ahora mismo. Los de Enrique consiguen tres puntos que les permiten seguir soñando con la salvación. El navarro se asegura seguir una semana más en el cargo y evita hundirse aún más en la zona de descenso. Seis puntos son los que separan al Nàstic de la zona de salvación a la espera de los resultados de Rayo Majadahonda y Tenerife.