El Real Madrid ya ha empezado a planificar la temporada que viene, es la mejor de las noticias posibles para los aficionados blancos que el martes pasado daban por acabada la temporada con la eliminación de la Champions League. El equipo había perdido todas las opciones de títulos en tan solo una semana. Dos derrotas frente al F.C. Barcelona en el Santiago Bernabéu dejaron al equipo fuera de la Copa del Rey y a 12 puntos del líder. Además de lo doloroso de perder contra el máximo rival en tu casa, lo contundente del resultado en el primer partido (0-3), sumado a la sensación de que el equipo tuvo ocasiones para hacer más de un gol y fue incapaz de materializarlas, dejó muy tocado al equipo.

Se ha perdido la mentalidad necesaria para ganar

El Ajax también se encontró todo de cara en el Bernabéu, dos palos del Real Madrid, dos lesionados en la primera mitad y dos goles en sus dos primeras llegadas fueron unas adversidades que no pudieron superar los madridistas. Este Real Madrid se caracterizaba por su fortaleza mental, capaces de sobreponerse a cualquier elemento en Europa con Zidane a la cabeza. Acuérdense de la remontada frente al Wolfsburgo, la victoria por penaltis en la final de Milán en su primera temporada. El caso es que, si miramos en 2017, la temporada de mayor dominio y mejor juego de su equipo, no hubo partido “fácil” en Europa. Frente al Nápoles en octavos se empezó perdiendo en ambos partidos para acabar remontando. Frente al Bayern en cuartos se comenzó perdiendo en Múnich e incluso tuvieron un penalti los bávaros para hacer el 0-2 que Vidal mandó a las nubes, a pesar de la victoria, en el Bernabéu fue necesaria una prórroga para pasar. Por último, en las semifinales frente al Atlético de Madrid, la contundente victoria en el Bernabéu no evitó el sufrimiento en el Vicente Calderón, con un Atlético de Madrid que se puso 2-0 y llegó a creer en la remontada.

Zidane remarcó más sus fracasos que sus éxitos

En su última temporada, el equipo comenzó arrasando para luego caer en picado, se quedó rápidamente sin opciones en Liga y Copa, pero esa superioridad mental volvió a aparecer en Europa, el equipo pasó por encima del PSG que era el gran favorito visto el momento de forma y eso que otra vez comenzó perdiendo en el Bernabéu. Supo sufrir frente a la Juventus, que estuvo a dos minutos de lograr remontar el 0-3 de la ida, pues un polémico penalti llevó a los blancos a las semifinales. Otra vez tocó sufrir y mucho, pues el Bayern de Múnich golpeó primero en los dos encuentros, pero este equipo tenía un don especial con la UEFA Champions League, en Kiev se hizo historia, pero la mala temporada hizo que Zidane se viera obligado a decir adiós. El francés ya hablaba de la necesidad de un cambio para seguir ganando y por eso dio un paso a un lado.

Ahora tiene más poder y es necesaria su mano en este equipo

Ahora ha vuelto para encabezar ese cambio, más descansado, porque como él explicó ayer ser entrenador del Real Madrid “es otra cosa”, el cansancio y la presión afectan más que en ningún otro sitio. Florentino Pérez ha recurrido otra vez a su amor platónico, lo de Zidane y el presidente es una de las mayores relaciones de fidelidad del mundo del fútbol. En un periodo en el que nadie mira por el bien de los demás, presidente y entrenador van más allá, pero por encima de todo está el Real Madrid. Zidane llega con más poder que antes para llevar a cabo ese cambio para volver a ganar. El equipo necesita a Zidane más que nunca para volver a pelear por todas las competiciones.