El Granada CF llegaba a Almería con la intención de romper un maleficio que le mantenía sin sumar en la provincia indálica desde hacía dos décadas. Los hombres de Diego Martínez pisaron tierras vecinas con el objetivo de llevarse tres puntos que mantuvieran la distancia de los granadinos con sus perseguidores, así como con el líder Osasuna. En ese contexto comenzó un partido cuyos prolegómenos dejaron incidentes y malentendidos sobre la ubicación de la afición granadinista en el Estadio Juegos del Mediterráneo.

El choque comenzó movido, con el Almería incidiendo sobre la meta de un Rui Silva que se mostró algo inseguro a la hora de participar en la salida de balón de su equipo, propiciando así una de las mejores oportunidades del partido, una jugada en la que Juan Carlos Real aprovechó el fallo del guardameta luso para poner un balón al que no llegó Demirovic al segundo palo. El conjunto nazarí consiguió desperezarse y empezó a dominar el encuentro, aunque no con mucha claridad, ya que el Almería aprovechó los despistes de su rival en las transiciones para crear peligro a la contra. En medio del ida y vuelta en el que transcurría el partido, llegaron varias acciones para la polémica; el Granada reclamó la expulsión para Yan Eteki en una acción en la que el centrocampista africano paró de manera ilegal al delantero granadino Rodri Ríos cuando este encaraba solo la portería defendida por René, quien finalmente consiguió adelantarse a su oponente y despejar el balón fuera de sus dominios. El colegiado Vicandi Garrido no vió la infracción y mandó seguir. También se quejó el conjunto rojiblanco, hoy de negro, por una jugada en la que de nuevo Rodri encaraba la portería de René, aunque el colegiado vasco a instancias de su asistente abortó la jugada por un fuera de juego inexistente. Aún así, el Granada siguió intentándolo y Ángel Montoro estuvo a punto de batir la portería rival en un golpeo que se marchó por poco. Con esto se llegó al descanso.

La segunda mitad comenzó con un Almería más decidido en ataque, que ganó velocidad y desborde con la entrada de Luis Rioja. El Granada no cesó en su empeño y estuvo cerca de anotar por mediación de Rodri, que no midió bien los tiempos para rematar una buena jugada por banda. A partir de ahí los nazaríes se fueron diluyendo, de ahí que Diego Martínez buscara dotar de aire al ataque dando ingreso en el verde a Puertas y Ramos, en sustitución de Álvaro Vadillo y Rodrigo. A pesar de ello, el partido se tornó en una sucesión de errores por parte de ambos equipos que evitó una variación en el marcador. El partido murió finalmente sin pena ni gloria para nadie, dejando el primer punto en el botín para el Granada en Almería en los últimos veinte años, así como las bajas de Víctor Díaz y Fede San Emeterio, que vieron la quinta amarilla en el día de hoy.