Asturias vuelve a pararse. Dos ciudades con un mismo objetivo. 27 kilómetros que separan una de las rivalidades más grandes del fútbol español y que les enfrenta en uno de los mejores y más emocionantes derbis del panorama futbolístico nacional.

El templo rojiblanco aguarda emocionado la cita con más tensión de la temporada. Un estadio que lucirá sus mejores galas, lleno hasta la bandera y acogiendo tanto a rojos y blanco como a azules. Un lleno que ya se vislumbra, El Molinón nunca falla. La fiesta estará servida ya el día antes, los bares se preparan para acoger más afición y los nervios empiezan a aflorar.

Un derbi rojiblanco

El Sporting se prepara un año más para recibir al eterno rival, para intentar buscar la deseada victoria contra sus vecinos más próximos. Se ven con más actitud y sobre todo llegan mejor que en el derbi de la primera vuelta.

Los pupilos de José Alberto ven este derbi con más optimismo que el pasado. Con la fuerza de jugar en casa y con una racha mucho más positiva detrás de ellos. Tres partidos seguidos sumando los tres puntos. Pese a todo, se sigue acusando mucho el sufrimiento y la facilidad de los rivales para llegar al área rojiblanca. Una buena racha de resultados que se tiene en cuenta en el rival. Anquela, entrenador del Real Oviedo ya advertía en rueda de prensa del buen momento en el que está el equipo gijonés. "El Sporting es un buen equipo con muchas cosas. Están en un buen momento".

El Real Sporting tiene hambre de victoria contra el Oviedo. No ganan desde la temporada 2002/03. Los derbis más recientes se saldaron con dos victoria para los carbayones y un empate.

Las ganas, la mejorada actitud y el momento en el que se llega al encuentro hacen que el entorno rojiblanco tenga muchas más esperanzas que en el derbi del Carlos Tartiere de esta misma temporada, en la que llegaban casi agonizando. Una derrota dolorosa que supuso muchos cambios, empezando por el del entrenador. Toca cambiar la historia de la temporada.

Un derbi azul

En la capital por otro lado se vive con la misma tensión y emoción. La ilusión de otra victoria, de volver a ganar, y de derrotar al enemigo ante tus aficionados y también ante los suyos.

El Oviedo llega en un gran momento de forma, también tras ganar su último partido, y con sus jugadores como un bloque. Literalmente como un bloque, el partido ante el Nàstic así lo demostró. Los oviedistas no dejaron lugar a dudas en la jornada previa al Gran partido.

La victoria del Real Oviedo les supondría estar más cerca que nunca del objetivo de los play off.

El Oviedo llegará a Gijón con 1200 aficionados que les cubrirán las espaldas en un Molinón a reventar de rojiblancos.

Sus juggadores está en plena forma y estos partidos son los que más gusta jugar. Sus goleadores llegan enchufados y los encargados de la creación del juego ya vienen demostrando su calidad en toda la temporada. Toca continuar la historia de la temporada.

Un derbi que destaca por la igualdad en el momento de ambos conjuntos. Los azules a ganar por el play off, y los rojiblancos a ganar para no perder la estela de los de arriba. Acercarse a la zona de play off lo máximo posible.

Por otro lado, la convocatoria del Real Sporting será pública el propio día del partido. 

Convocatoria del Real Oviedo: Alfonso, Champange, Johannesson, Alanís, Forlín, Carlos Hernández, Ramón Folch, Toché, Saúl Berjón, Yoel Bárcenas, Ibra, Christian Fernández, Cralos Martínez, Tejera, Joselu, Mossa, Javi Muñoz, Viti y Javi Hernández.

Dos equipos con ganas de victoria, dos equipos que quieren afianzarse para afrontar con la máxima fuerza posible la recta final de la temporada. Un derbi como pocos, un derbi de rivales, pero que les une por la ilusión, por la emoción. Una fiesta en Asturias.

POSIBLES ONCES: