Álvaro Morata vuelve a alegrar a España con sus goles, como ya lo haría en sus tiempos con la Sub-21. De los desesperantes errores ante Noruega hasta La Veleta, el colchonero sacó su mejor versión y sonrisa. Doblete en un arduo partido contra una Malta extremadamente defensiva. De momento, aquí hay nueve goleador.
Sin Luis Enrique en el banquillo por esos problemas personales que le obligaron a abandonar la concentración, las novedades no solo estuvieron en el banquillo. Porque hasta ocho cambios introdujeron tanto el asturiano como su segundo, Robert Moreno. Desde la portería hasta la banda izquierda entera, la oportunidad frente al conjunto maltés llegaba para Kepa, Hermoso, Bernat, Gayá o Canales. Mientras, en el otro bando no había sorpresas, ni las habría durante el choque.
Porque Malta salió a su campo dispuesta a complicar la tarea del gol a la Selección Española y poco más. Completamente encerrada atrás, con un marcaje pegajoso, si pasa el balón no lo hace el poseedor... La tónica del duelo estaba escrita de antemano. Por tanto, la ardua tarea para los visitantes en La Veleta era hallar esos mínimos huecos de una poblada muralla maltesa formando dos franjas infranqueables. Esa marcada 5-4-1 anunciaba que no sería un partido sencillo.
Morata se lo guisa y se lo come
En el pronosticado dominio español total y absoluto frente al muro maltés, Asensio fue de los más activos en 'La Roja', como ya estuvo en el encuentro frente a Noruega. Igual se mostró Morata, que deseaba tener mejor acierto que contra los nórdicos. Lo tuvo, por suerte para los hombres de Robert Moreno, quien se mantenía menos instructivo que 'Lucho' en otras ocasiones desde la zona técnica. Así, con el objetivo de abrir ese cerrojo local, España movía lo más rápido posible.
Iniciaba desde atrás, abría mucho el campo y trataba de romper líneas a través de Canales o Asensio. Sin embargo, la apuesta inicial de los dirigentes nacionales no era la más adecuada para un partido así. Pronto se dieron cuenta y solucionaron esas carencias. Sergi Roberto estaba errático en muchos pases, proporcionando muy poca profundidad en la derecha. Por su parte, a Saúl le falló la efectividad. Porque de sus botas salieron las dos primeras ocasiones de 'La Roja'. No cogieron puerta, pero prepararon el terreno, ya que del gol se ocuparía otro.
Morata se marcó un Carlos Arguiñano y zanjó la polémica creada por sus numerosos desaciertos anotadores ante Noruega. Corría el minuto 31 y, cosas del fútbol, el tanto del colchonero llegó en una jugada de tres toques. Hermoso asistió desde lejos con una pelota bombeada hasta el pecho del delantero, que se guisó y comió el plato. Control orientado, giro y definición con algo de fortuna ante Bonello. Agujero, por fin, en ese muro de Malta, sin apenas 'tiki-taka'. El juego directo también vale.
Navas revoluciona y Morata repite
Hasta el descanso, Malta solo estuvo a punto de sorprender en una de las pocas salidas donde logró dar más de cuatro pases acertados y seguidos. Mucha sangre fría la de Kepa para sacar la pelota jugando tras la recuperación española, pero más 'huevos' todavía de Hermoso para dar un taconazo en su propia área. Se habían animado los malteses pero la calidad de España una losa demasiado dura.
Pero el que sí se animaba como muchos otros partidos era el capitán Ramos, quien rondaba el área rival y recibía un fuerte empujón de Nwoko. Chut alto de Asensio para cerrar una primera mitad light tanto en fútbol como en ocasiones. Nunca es sencillo vencer a este tipo de equipos. La humildad hace fuerte a los hombres. Esos que no tardó más el seleccionador nacional en sustituir: al campo Muniain y Navas. Era necesario explotar las pocas debilidades maltesas. El lateral sevillano supo cómo hacerlo.
Eso sí, el sacrificado no fue Sergi Roberto, sino Saúl, quien había disfrutado de un último remate alto tras una oportunidad de Asensio. El mallorquín disparó potente pero se encontró la buena respuesta del arquero, mientras minutos antes había chutado algo más suave en otra buena jugada de 'La Roja'. Morata también volvió a tenerla, pero su cabezazo se fue desviado. No sucedió lo mismo con el segundo tanto de su cuenta particular y el definitivo de España.
Ese 0-2 del minuto 74 nació en las botas de 'Jesusito' Navas, quien estaba revolucionando la banda derecha. Asistencia vía aérea precisa para el testarazo a bocajarro del nueve español. Doblete y fin del debate periodístico por los goles. Ante el resultado, el técnico de Malta metió a un hombre más veloz en ataque por si alguna contra se presentaba. Pero complicado después de no haber inquietado a Kepa en tantos minutos jugados.
Al final fue Asensio y Canales quienes tuvieron las dos últimas ocasiones de un encuentro que, sin más sobresaltos, sirvió una cómoda victoria para la Selección Española. Otros tres puntos más al casillero.