El Rayo Vallecano, además de estar luchando durante la competición doméstica por intentar salir de los puestos bajos de la tabla, tiene otros retos particulares en los que ha progresado durante la campaña. Precisamente uno de estos propósitos era mejorar la defensa, ya que era la causante de que los de Vallecas recibieran muchos goles, y, por tanto, perdieran puntos a pesar de dar buenas sensaciones sobre el terreno de juego.

Álex Moreno comete faltas, pero con fair play

Para esta mejora, Míchel cambió el sistema de juego. Pasó de poner dos centrales sobre el césped a tres, a quienes ayudaban dos carrileros por las bandas, habitualmente Advíncula en la derecha y Álex Moreno en la izquierda. Los resultados mejoraron durante unas jornadas, pero el bajón llegó, y regresaron a los tan temidos puestos bajos de la tabla. Precisamente estos malos números desencadenaron la vuelta de Paco Jémez al banquillo, y frente al Betis mostrará cómo va a organizar la retaguardia en los diez partidos restantes.

@ProFootballDB, a través de Twitter, ha dejado una estadística que es cuanto menos interesante, y que habla muy bien acerca de la defensa propuesta por Míchel, sobre todo del indiscutible Álex Moreno. El lateral zurdo es considerado como el zaguero más productivo de La Liga debido a que puede robar balones o cometer faltas, pero sin ser sucio en el juego. El autor del gol que dio el ascenso al Rayo Vallecano, aunque puede ser un futbolista a vigilar por su gran faceta ofensiva, cada vez va puliendo más sus dotes defensivas, haciendo de él una auténtica pesadilla para los atacantes rivales.

Álex Moreno poniendo un centro | Fotografía: Mario Paz (VAVEL)
Álex Moreno poniendo un centro | Fotografía: Mario Paz (VAVEL)

El catalán, a lo largo de los 27 partidos que ha estado sobre el terreno de juego, ha cometido un total de 32 faltas, un promedio de 10,7 faltas por tarjeta, y únicamente ha visto tres cartulinas amarillas. El reconvertido a lateral, siempre se ha caracterizado por ser un jugador veloz, habilidoso, regateador y atrevido, pero también por ser un futbolista respetuoso con los rivales, y eso se demuestra en que, a pesar de recuperar balones para los suyos, lo hace con la eficacia suficiente para no dañar al contrario. En esta lista que relaciona ambas variables, también se encuentran Advíncula y Jordi Amat. El defensa más castigado, en lo que a sanciones se refiere, de La Liga, es Íñigo Martínez, que ve tarjeta por cada tres infracciones.