¡Hola Irlanda! Este es el mensaje que lanza la selección española sub-17 en Suiza, donde se ha concentrado estos días para disputar la Ronda Élite clasificatoria para el próximo europeo que se disputará en la República de Irlanda.

Unos días en los que los chicos han dado todo de sí y han conseguido estar en el campeonato tras cumplir una clasificación perfecta con un pleno de triunfos. El primer rival fue la selección griega de la que se deshizo con facilidad, con dos goles de Germán Valera y Adrián Gómez.

Intensidad ante Grecia

En el transcurso de los 90 minutos, ambos conjuntos saltaron al césped muy nerviosos pero, poco a poco, fueron encontrando su lugar. Así, con el paso de los minutos, los chicos de David Gordo se hicieron con el control del partido gracias a Ilaix Moriba y Aitor Gelardo, que eran los líderes del centro del campo. España buscaba el gol mediante la asociación y el juego con los interiores. Enfrente, Grecia se aferraba a una dura defensa y en montar contras con el robo del balón.

De esta forma, en el segundo tiempo, Germán Valera no falló y adelantó al combinado español tras recoger un rechace dentro del área. Después, fue Adrián Gómez quien marcó el segundo con un magnífico toque a la red.

El segundo rival fue Kosovo. Ante ellos, también los chicos de Gordo lograron la victoria. Esta vez, el marcador terminó con un solo gol de Pablo Moreno. Desde el pitido inicial, España tuvo la posesión de juego ante  un combinado que arrancó con una fuerte presión que fue disminuyendo. De esta manera, en el minuto 54, Moreno recogió su propio rechace y, de tiro cruzado, puso el gol de España.

Con dos victorias a sus espaldas, España estaba a solo un punto de sellar su clasificación. Con un empate ante Ucrania era suficiente. Pero David Gordo y sus pupilos querían cerrar la fase por todo lo alto.

Cerrar por todo lo alto

Así, salieron ante los ucranianos sin pensar en los puntos y como si no estuvieran prácticamente clasificados. La intensidad se hizo notable desde el pitido inicial. Una intensidad que se materializó en numerosas llegadas al área rival. A los 15 minutos, Jordi Escobar pudo poner el primero pero que rechazó Nescheret a bocajarro. Valero, Navarro y el propio Escobar estuvieron muy activos en el ataque pero sin premio. Así fue la historia durante todo el encuentro. Con este empate, España ya estaba clasificada pero, en el minuto 90, Beñat Turrientes, enganchó un balón que batió a Neshcheret logrando el triunfo español.

España llegará a Irlanda como primeros de grupo, imbatidos y con nueve de nueve puntos posibles.

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