Vuelven las noches europeas para el Fútbol Club Barcelona y lo hacen con la máxima ilusión e incertidumbre. Siendo el único equipo español que está clasificado para los cuartos de final de la máxima competición continental, los de Ernesto Valverde están obligados a dar un paso hacia adelante y tendrán que superar el escollo que supone Old Trafford y la gran subida de moral que ha demostrado tener el Manchester United Football Club de Ole Gunnar Solskjær, un técnico confiado y convencido de que Leo Messi "no es imparable".

Con confianza y teniendo mucha ventaja en la competición doméstica, este Fútbol Club Barcelona afronta el reto de seguir vivo en la UEFA Champions League, siendo consciente de que entre sus aficionados, las expectativas son altas.

Para evitar sorpresas y caer en los malos recuerdos que se generaron después de la eliminatoria que vivieron en Roma durante el año pasado, los azulgranas quieren anular el margen de error lo más pronto posible y golpear primero en un estadio que impone y no poco.

Con la mente puesta en revalidar los títulos conseguidos durante la pasada temporada y en conseguir un título que se les lleva resistiendo desde hace cuatro temporadas, el Fútbol Club Barcelona ha pisado territorio británico para dejar huella y quieren hacerlo consiguiendo un buen resultado de cara a jugar el partido de vuelta en el Camp Nou, un estadio que siempre aprieta cuando el equipo lo necesita.