Desde que el Real Oviedo se mudó a La Ería, al Nuevo Carlos Tartiere, ha habido un problema que ha preocupado al oviedismo en especial, y eso es el estado del césped, ya que todas las temporadas presenta graves problemas, sobre todo cuando llueve.

A pesar de que la semana pasada, los carbayones se enfrentaban a Las Palmas, un equipo acostumbrado al buen clima y a la poca lluvia, el estado del verde del Tartiere perjudicó más al Real Oviedo, ya que los de Anquela quisieron tener el encuentro bajo control en todo momento, jugando con la pelota y siendo verticales en ciertas fases, centrando el ataque en el desborde de Saúl Berjón y Yoel Bárcenas.

Sin embargo, ninguno de los dos hombres de banda estuvieron acertados, especialmente Saúl, ya que era su banda la más afectada por la lluvia en la segunda mitad, y cada vez que intentaba un regate el balón se quedaba totalmente frenado por el estado del césped, levantando grandes cantidades de agua. 

La lluvia fue un problema

El juego combinativo tampoco ayudaba a los azules, ya que muchos de los pases que se dieron en la banda izquierda, aunque en los últimos 15 minutos del encuentro casi todo el campo estaba inundado, se quedaron cortos ya que el agua frenaba completamente el esférico, afectando directamente al buen juego del equipo que estaba dominando el encuentro en cuanto a posesión de balón, pero que encontraba dificultades según se acercaba a puerta.

De hecho, la única vez que el estado del césped puede haber ayudado al Real Oviedo fue en el gol de Ibra, ya que una mala salida del portero, combinada con la irregular trayectoria del balón, pudo haber desconcentrado al guardameta y provocado ese fallo.

El problema del césped cada vez preocupa más al oviedismo, ya que no es la primera temporada que esto ocurre, y aunque podía ser algo más lógico en los tiempos de Segunda B y Tercera, el Real Oviedo aspira a jugar en Primera División, con futbolistas mimados que están acostumbrados a jugar en alfombras, y pueden encontrarse con un campo en condiciones poco favorables para la práctica del fútbol.

Además, ese problema afecta directamente al juego del equipo, como se ha visto en el empate ante Las Palmas, y en caso de apostar por un estilo atractivo, no va a poder desarrollarse a la perfección siempre que llueva en Oviedo. Además, también hay que destacar que el club ha sido multado por la liga debido al estado del verde, y la sensación es que el Real Oviedo tendrá que asumir esa sanción durante muchas temporadas si nada cambia. 

VAVEL Logo
Sobre el autor