Los rivales del submarino amarillo han igualado más la lucha por la permanencia aún si cabe; la victoria del Real Valladolid sobre el Girona y la de la SD Huesca frente a la SD Eibar enciende las alarmas en tierras valencianas.

Y es que el Villarreal deberá sumar en Anoeta si quiere salir airoso de la situación, pues actualmente se encuentra dos puntos por encima del descenso. El submarino amarillo tendrá que verse las caras con la Real Sociedad, Real Madrid y Getafe fuera de casa, y SD Huesca y SD Eibar en su propio Estadio.

Sin duda alguna, debido a los escasos choques que restan de aquí a final de temporada, todos ellos son de gran importancia para el devenir de ésta, pero el que más destaca es el choque frente a los maños, el cual se prevee clave para la resolución de la presente campaña; mantener o perder la categoría.

Por lo tanto, los de Javier Calleja llegarán motivados al Estadio de Anoeta, pues están empezando a jugarse la vida, a ver el peligro real, y por ello, serán muy peligrosos, más teniendo en cuenta el fondo de armario del que gozan. Jugadores como Santiago Cazorla, Vicente Iborra o Carlos Bacca pueden ser decisivos, teniendo en cuenta el excelente estado de forma del jovencísimo nigeriano Chukwueze, futbolista del Villarreal B, quién ha firmado 5 tantos en La Liga Santander, otro en Europa League y 2 en Copa del Rey.

Los amarillos suman un dígito de goles total negativo, con -4; eso sí, el número del que gozan éstos es claramente superior al de sus máximos perseguidores, por lo que en algún posible empate particular, los valencianos quedarían por delante.

En definitiva, el submarino deberá apretar los dientes en Anoeta, apurando sus opciones al máximo, con el objetivo de no pasar apuro alguno para salvar la categoría.