El Dépor llegaba a Soria en una situación de crisis extrema. Ha sido una semana tremendamente difícil para la parroquia blanquiazul. A la derrota frente al Extremdura en Riazor, se le sumó la posterior dimisión de la Junta Directiva. Envuelto en un caos institucional, el equipo demostró ante el Numancia que peleará hasta el final por el ascenso a Primera División. 

El Dépor sentenció en ocho minutos

Como viendo siendo habitual desde la llegada de José Luís Martí al banquillo, el Deportivo empezó el encuentro con altas revoluciones. Presión intensa, transiciones rápidas y saliendo victorioso en los balones divididos. Dos minutos le bastaron a Borja Valle para anotar el primero del partido después de una buena jugada colectiva. Poco después, en el minuto ocho, Michele Somma se estrenaba como goleador blanquiazul al remate de un córner. Curiosamente, el Dépor no entraba tan bien en un partido desde que se adelantara por 2-0 en Riazor, también frente al Numancia. Sin embargo, a diferencia del partido de la primera vuelta, los coruñeses supieron mantener la ventaja en el marcador. 

El arte de saber sufrir

¿Es posible ser hincha del Dépor y no sufrir durante un partido? La respuesta es no. El equipo logró una justa y merecida victoria pero no sin antes sufrir por ello. La expulsión de Somma favoreció a que el Numancia se hiciera con el control del partido y anotara el gol que reducía diferencias. Pese a que por un momento pudieron aparecer los fantasmas del pasado, el Dépor supo cerrar filas para aferrarse a una victoria que necesitaba como el comer. 

Gran acierto de Martí 

El planteamiento de José Luís Martí fue un acierto absoluto. El técnico balear fue objeto de criticas ante el Extremadura por elección para el once titular. No obstante, todo lo que Martí pudo hacer mal la semana pasada, lo solucionó con creces en Soria. El Dépor apostó por juntar a Quique, Carlos, Cartabia y Valle en ataque. Cuatro hombres de gran potencial ofensivo. En la media, Edu Expósito y Bergantiños formaron la que es una de las parejas más equilibradas que puede alinear el Deportivo. Edu para crear y organizar. Álex para recuperar y jugar de primeras. Los dos estuvieron pletóricos. Aunque durante la previa del partido había dudas sobre si el equipo aguantaría sin partirse (defensa-ataque), esas dudas quedaron disipadas antes del minuto 10 de encuentro. 

Regresaron Cartabia y Carlos

La enfermería del Deportivo se vacía poco a poco. Los últimos en sumarse a la lista de disponibles para José Luís Martí fueron Federico Cartabia y Carlos Fernández. Ambos muy necesarios para el equipo. El argentino ya tuvo unos minutos ante el Extremadura en los que demostró que puede ser decisivo en el tramo final de liga. En Soria fue el encargado de asistir a Somma en el segundo tanto de su equipo. Por su parte, Carlos Fernández, volvió a contagiar al equipo de alegría y buen juego. Es inevitable preguntarse qué hubiese sido de la temporada del Dépor si las lesiones no se hubiesen cebado con el jugador cedido por el Sevilla. Cuando Carlos juega, pasan cosas. Quique y Valle se beneficiaron de su sola presencia. Para el Deportivo, conservar la buena salud de Fernández es fundamental. 

"Todavía no hemos hecho nada"

Con estas palabras, José Luís Martí trató de suavizar la euforia herculina en sala de prensa. El técnico balear se mostró orgulloso y satisfecho por la victoria de los suyos pero aseguró que todavía queda mucho trabajo por hacer. Desde su llegada, el Dépor ha mejorado su imagen pero sigue fuera de los puestos que acreditan la disputa del playoff. Ganar en La Romareda supondría para el Deportivo la confirmación su recuperación. 

"Hemos regalado los primeros minutos"

Aritz López Garai se mostró crítico con los suyos ante los medios. El técnico vasco lamentó el flojo inicio de partido por parte de sus jugadores. Sobre los gritos que pidieron su cese durante el encuentro, López Garai confirmó su intención de seguir trabajando para revertir la difícil situación que atraviesa el Numancia.