Muchos, a principios de temporada, lo daban como un claro candidato al descenso. Es más, debido a su presupuesto – tuvieron que dejar a algunos jugadores sin inscribir por el límite salarial-, algunos lo daban ya por descendido. Sin embargo, con esfuerzo, humildad y mucho trabajo, el equipo dirigido por el ex jugador Manuel Mosquera ha logrado la salvación, a dos jornadas del cierre liguero.

Para ello, no obstante y citando las anteriores palabras, han tenido que trabajar como ningún equipo de Segunda. Debido a su ascenso a LaLiga 1|2|3, tuvo que pasar tres rondas, los extremeños empezaron la temporada con menos tiempo, y margen de error, que sus contrincantes. Durante ese verano, los extremeños consiguieron hacerse con los servicios de futbolistas como Granero, Fausto, Diego Capel o Casto. Aunque, por culpa del límite salarial, hubo algunos que no pudieron estrenarse, como fue el caso de Casto. Con todo esto, el Extremadura iniciaría su andadura por LaLiga 1|2|3.

Las primeras jornadas no transcurrieron de la mejor manera. Con Sabas en el banquillo, máximo artífice del ascenso, los azulgranas tan solo sumaron dos victorias, una de ellas contra el Cádiz, y tres empates. La derrota contra Osasuna en la décimo tercera jornada supondría un punto de inflexión. La dirección deportiva de la entidad, pese a las quejas de la afición, decidía cesar a Sabas y buscar a un entrenador más capacitado para el puesto. De esta manera, llegaría Rodri, un entrenador que, con poco tiempo, conseguiría meterse a la afición y a la plantilla en su bolsillo.

Las cosas mejoraron y los extremeños llegaron a estar, en algunas jornadas, fuera de los puestos de descenso. El estado de gracia de Enric Gallego, unido a la fuerza de unión del equipo, provocaron actuaciones extraordinarias del equipo, siendo un Reus 1-4 Extremadura -los cuatro goles de Gallego- la mejor actuación de los extremeños. Se confirmó, incluso, que muchos jugadores del cuadro azulgrana pasaban horas extras con Rodri para seguir aprendiendo y mejorando. Además, con la venta de Enric Gallego al Huesca, se consiguió aumentar el límite salarial, lo que provocó la inscripción de jugadores como Casto y el fichaje de otros como Ortuño, Alberto Perea, etc.

Todo iba bien en Almendralejo hasta que una desgraciada racha negativa de varias jornadas sin ganar acabaría con Rodri. La situación indicaba lo peor. Pese a que la permanencia no estaba muy lejos, a tan solo tres puntos, las sensaciones no eran las mejores y el equipo parecía hundido tanto mental como físicamente. Hasta que apareció Manuel. El histórico futbolista del Extremadura, máximo artillero histórico del conjunto azulgrana, devolvería la fe a la parroquia extremeña y, con una increíble racha de cinco victorias seguidas, el equipo saldría del descenso.

Con el empate contra el Lugo la semana pasada, los de Manuel confirmaron la permanencia en LaLiga 1|2|3. El domingo en Carranza, sin embargo y tal y como indicaron algunos futbolistas en rueda de prensa, no vendrán de vacaciones y darán lo mejor de sí.