El Real Madrid, otro año más, se acogía a su competición estrella, esa competición que, si es un mal año, pero se gana, entonces la temporada es buena. El conjunto blanco quería la cuarta consecutiva, algo realmente complicado, pero no imposible. A medida que iba pasando la temporada, en Liga y Copa, cada vez era más importante la UEFA Champions League.

El Real Madrid empezaba su competición con un espectacular partido frente a la Roma, un 3-0 con Julen Lopetegui en el banquillo. Fueron tres goles muy buenos y el equipo madrileño no paraba de mejorar. Los goles los anotaron Isco, Bale y Mariano. Todo salió bien en ese partido, Mariano, que volvía al conjunto blanco, metió un golazo por toda la escuadra. La afición ya pensaba en la 14ª, era normal, después de ver el partidazo de los hombres de, en ese momento, Julen Lopetegui.

En el segundo encuentro se pasó de la alegría de Madrid al desconcierto de Moscú, tras perder 1-0 frente al CSKA de Moscú. El tercer partido de la fase de grupos fue contra el Viktoria Plzen, el encuentro lo venció el Real Madrid, pero por la mínima, 2-1 y el público del Bernabéu se empezaba a preguntar qué le estaba pasando al conjunto blanco, ya que en la Liga iban muy alejados del líder.

El Real Madrid se desquitó de las dudas del partido en el Bernabéu con un 0-5 en el Doosan Arena, en la República Checa. En Roma consiguió la victoria, pero por 0-2. El último partido en casa, el CSKA de Moscú le endosó al conjunto madrileño un 0-3, y ahí volvían a aparecer las dudas y los cabreos de los aficionados, que veían cómo su equipo se iba desinflando y no volvía a la senda de la victoria.

Llegaron los octavos de final y el Madrid se enfrentaba al Ajax, los más optimistas lo celebraban, pero poco celebrarían en los partidos. En Ámsterdam el Real Madrid, con Solari al mando, consiguió ganar por un 1-2, un buen resultado para la vuelta. Ramos decidió forzar una tarjeta amarilla para poder pasar, si conseguían pasar, sin riesgo de suspensión a los cuartos de final.

Llegó el partido de vuelta. El Real Madrid se jugaba en una semana Liga, Copa y pasar a cuartos de final. Quedó eliminado de la Copa del Rey y llegó la Champions. El Madrid se aferraba a la única competición en la que todavía le quedaban opciones, ya que en Liga estaban muy alejados, además de que perderían el encuentro frente al FC Barcelona, quedándose ya a una distancia muy difícil de reducir.

En el partido de vuelta de los cuartos de final de la UEFA Champions League, el Real Madrid traía una buena ventaja, pero quizá se confiaron en exceso porque el Ajax salió en tromba hacía la portería de Courtois, y en el minuto siete ya había entrado el primer gol anotado por Ziyech. El segundo no tardaría en llegar, en el minuto 18 Neres ponía al Ajax por delante en la eliminatoria y el Madrid estaba a dos goles de pasar a cuartos y a uno de ir a la prórroga, así se iba a llegar al descanso.

En la segunda parte, el Madrid no iba a reaccionar y llegaría el tercer gol del Ajax, lo anotaría Dusan Tadic, aunque con tensión, ya que el gol iba a ser revisado por el VAR por un posible saque de banda. Todo el madridismo pendiente de la decisión del VAR que daría por válido el gol, dejando al Madrid a tres goles y tendría que apelar a la épica. Asensio haría el 1-3 y daría esperanzas a los aficionados del Real Madrid, pero llegaría un golazo de falta de Schone, dejaría un 1- 4 y las esperanzas de todo madridista se acababan, el Madrid estaba eliminado de su competición soñada. Era eliminado el campeón de los últimos tres años seguidos.