No dió lugar a la sorpresa el Barça Lassa en el segundo asalto de la eliminatoria  ante un combativo Tecnyaconta Zaragoza. No lo hizo, sin embargo, tan cómodamente como en el primer duelo entre ambos equipos, en el que los locales se impusieron por 101 a 59. Abrochó el segundo asalto de la eliminatoria ante un intimidante Tecnyaconta Zaragoza que resucitó el espíritu de la pasada ronda contra el Baskonia poniendo contra las cuerdas a un conjunto azulgrana que despertó en el tercer cuarto. Los visitantes, sin nada que perder, claudicaron sólo en una recta final en la que acusaron el poderío culé, que terminó reinando sobre el parquet del Palau Blaugrana por 76 a 70. Una victoria que costó sudor y sangre llevarse al bolsillo y que sólo pudo asegurarse en los últimos compases de un intenso choque que pone color culé en las semifinales de la Liga Endesa.

Tras barrer al elenco de Porfirio Fisac en la primera entrega de las sorprendentes semifinales de la Liga Endesa hacia la pelea por el título, el Barça Lassa de Svetislav Pesic buscaba este domingo volver a contentar a los suyos con una nueva renta favorable para poner rumbo hacia una nueva final por el título. Enfrente, jugadores como Okoye, Justiz o Radovic, que ya dejaron destellos de su valía en la eliminatoria ante el Baskonia y en ciertos momentos de la ida, querían decir la suya en unas semifinales con claro color culé. Lo hacían sin la veteranía de Bob McCaleb, a quien le pesó en exceso el vendaval azulgrana. 

El Zaragoza, en busca de la sorpresa

Como dejara claro uno de sus puntales en la previa del choque, Víctor Claver, la preocupación de los locales era no relajarse pese al plácido encuentro del viernes, lo que llevo a los barcelonistas a apretar el acelerador desde el minuto uno. Lo hizo con Pangos, Pau Ribas, Tomic, Singleton y el propio Claver inaugurando el cronómetro desde el parquet. No fue suficiente sin embargo para frenar el entusiasmo con el que el equipo zaragocista, sin nada que perder, saltaba al Palau Blaugrana en busca de un bocinazo para dejar claro que lo del viernes fue tan sólo un accidente. 

También quiso poner una marcha más el conjunto aragonés, y lo hizo desde los primeros instantes. Fue Stan Okoye quien dió las primeras señas de recuperación de los visitantes, comenzando el choque con siete puntos para liderar las opciones de los suyos en un intercambio de golpes. El cambio de chip se notó en las opciones ofensivas de los de Fisac, que dominaron a lo largo del primer periodo a través del rebote ofensivo. Haciendo bueno el "sí se puede" que alentaban los suyos desde la grada, los visitantes se llevaban el primer cuarto ofreciendo una mejorada imagen de la vista el pasado viernes (14 a 21) catapultados por el nigeriano.

Thomas Heurtel, ante la presencia de Fran Vázquez. FOTO: Noelia Déniz
Thomas Heurtel, ante la presencia de Fran Vázquez. FOTO: Noelia Déniz

La tónica se mantuvo con el inicio del segundo parcial, en el que el Zaragoza volvía a vestirse de matagigantes desdibujando al Barça. Lo hizo a través de una inquietante defensa y a la aportaciones ofensivas de hombres como Radovic, que noquearon a los de Pesic.

Kuric lidera la reacción culé

Un Barça impreciso en ambos lados de la cancha pagó el exceso de confianza diluyéndose hasta los trece puntos de desventaja. Sólo se mantuvo firme el base Thomas Heurtel, quien dió aire a los suyos cuajando 10 puntos. Sin embargo, ante el dominio visitante y cuando más lo necesitaba su equipo apareció él.  Autor de 25 puntos en el primer asalto, el estadounidense Kyle Kuric volvió a enfundarse la capa de superhéroe anotando siete puntos consecutivos para acercar a los suyos antes del descanso (36 a 40).

Hanga, en aprietos ante la defensa zaragocista. FOTO: Noelia Déniz
Hanga, en aprietos ante la defensa zaragocista. FOTO: Noelia Déniz

El duelo se retomó con una técnica sobre el técnico Porfirio Fisic que llevó a los azulgrana a intimidar en el marcador. Enloqueció el partido en el devenir del tercer cuarto, en un vaivén de imprecisiones que incrementó la tensión en la pista. Habiendo alcanzado la quinta falta el Tecnyaconta Zaragoza, el Barça se aprovechó de los tiros libres para ponerse por delante tras demasiados minutos remando a contracorriente. Atrás, Adam Hanga Pierre Oriola ponían el cerrojo para anular las intentonas visitantes. Un meritorio Thomas Heurtel, que lideró el parcial de 13 a 0 y una imponente defensa fueron las claves para la reacción culé, que culminaría en el 61 a 51 con el que se llegaría al último cuarto. 

No había dicho la última palabra el Tecnyaconta Zaragoza, que despertó en la recta final tras verse remontado en el tercer cuarto. Fue Nemanja Radovic el encargado de despertar viejos fantasmas en las gradas  del Palau Blaugrana y hacer soñar a los suyos, equilibrando la balanza a dos minutos para el término del choque. El montenegrino, junto al poderío interior de Javier Justiz, devolvieron las sensaciones a los de Fisac, que no cesaron en ningún momento. El intercambio de golpes no bastó, sin embargo al Zaragoza para volver a dar la campanada y el choque acabó decantándose una vez más hacia el actual subcampeón liguero, un Barça Lassa que pone rumbo hacia una nueva final de la Liga Endesa.

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