Si por algo es conocida la República de China es por la Gran Muralla China, impulsada por Qin Shi Huang hace más de 2500 años. Y hoy, esa Muralla pareció haber crecido y haberse trasladado a Francia, concretamente a El Havre, para defenderse de la España de Jorge Vilda.

España y China se enfrentaban en el último partido de la fase de grupos de la Copa del Mundo de Francia. Ambas se jugaban el billete a octavos. Con un empate o una victoria, las chicas de Vilda estarían en la siguiente fase.

Sin embargo, un triunfo asiático lo complicaría. Con un empate, ambas estarían clasificadas. Con estos antecedentes, los dos equipos saltaban al césped en lo que ha sido una auténtica final.

España quería ganar

No ha sido un partido muy brillante de España pero desde el minuto uno ha salido a llevarse los tres puntos. Bien es cierto que delante tenían a un conjunto asiático que se mostró muy pendiente de la defensa de su portería.

Con tres cambios respecto al enfrentamiento ante Alemania, Leila en el lateral zurdo, Patri Guijarro en mediocampo y Lucía García partían para buscar como nunca la portería de Peng. La asturiana fue la primera en protagonizar las dos llegadas más interesantes en el primer tramo.

A pesar de ello, la férrea defensa de Jia Xiuguan era cada vez más fuerte y más difícil de penetrar. Aun así, España no dejaba de intentarlo y los ataques eran más intensos pues las de Vilda eran las claras dominadoras del balón. Mariona Caldentay y Jennifer Hermoso protagonizaron una gran jugada que, a punto estuvo de significar el primer tanto. La primera, rozó el tanto y la segunda, de un cabezazo que detuvo la meta asiática.

No dio tiempo a más en una primera parte en la que España dio todo de sí pero no se vio premiada.

Llegaron los cambios

Al comienzo de la segunda mitad, Andrea Falcón entraba al césped por Mariona Caldentay. El guión seguía siendo el mismo patrón de la primera mitad. España, incansable, acechaba la red de Peng, que tuvo grandes intervenciones para salvar a su equipo. Patri Guijarro, sin duda, fue el gran dolor de cabeza de la portera asiática, desde la frontal.

El marcador no se abría y cada vez quedaba menos tiempo para el pitido final. Cierto es que el resultado le valía a las dos para estar en la siguiente fase. Pero, aunque a España le servía, seguía intentando romper la barrera china con un par de ocasiones de Jenni Hermoso y Alexia Putellas. Pero nada se pudo hacer.

Así, la selección china renunció a atacar y solo se quedó para jugar al fútbol. Se centró en su área para mantener la pelota lejos de su portería. A diferencia, España consumió los minutos en el área rival. Con 23 tiros a puerta terminó la selección española este encuentro.

China, un rival que dejó que desear

China solo salió a defender cuando se esperaba más de ellas en el ataque. Sin embargo, se encerró atrás y se limitó a esperar que el marcador no se moviese para asegurar su tercera plaza de grupo y poder tener la clasificación. Solo probó a Sandra Paños cuando llegaba el descanso en una jugada propiciada por una pérdida de Leila y que remató alto Wang Shanshan.

Con el luminoso a cero se llegó al final y el grupo de Vilda accede, por méritos propios, a los octavos de final por primera vez en la historia como segunda de grupo. El próximo duelo será ante Estados Unidos o Suecia el lunes 24 de junio en Reims.