El jugador grancanario llegó a la cantera del Barcelona procedente de la Unión Deportiva Las Palmas. Por aquel entonces, el delantero había firmado un contrato por cuatro temporadas, que finalizará el próximo 1 de julio por decisión personal del propio futbolista.

El club le llegó a proponer la renovación el pasado mes de febrero. Sin embargo, el jugador no firmó. Mújica, acabó el presente curso siendo el segundo máximo anotador del filial con 7 goles en 33 partidos. La marcha del delantero sorprende. Y más cuando desde el propio club se ha hecho una apuesta con él. En 2016, Luis Enrique se lo llevó a la pretemporada del primer equipo. En esa concentración, el jugador debutó ante el Celtic de Glasgow, y posteriormente jugaría contra el inesperado campeón de la Premier League de esa temporada, el Leicester, al que por cierto, anotó su primer gol con los mayores.

Su temporada más complicada en la Masía fue por culpa de una lesión en el bíceps femoral del muslo derecho en 2017, que lo tuvo fuera de los terrenos de juego cerca de 9 meses. Al volver de su lesión, solo disputó 3 partidos con el Barça B en Segunda División. En ese mercado de invierno, el club decidió que lo mejor para su progresión era cederlo a un equipo de Segunda B para que recuperara el ritmo competitivo. El destino finalmente fue el Cornellá. Con el club catalán, tuvo unos registros de 5 goles en 14 partidos. Su rendimiento, a la conclusión del préstamo, lo llevó a volver al conjunto culé donde volvió a ser importante.

Su salida del Barcelona pone en bandeja de oro la candidatura de su compañero, Abel Ruíz, al primer equipo como solución de la casa si finalmente no llegan los refuerzos deseados. El mal rendimiento de Kevin Prince Boateng, previsiblemente hará que la dirección deportiva sea más prudente a la hora de fichar. 

Mújica, agradecido por lo que ha vivido durante estas cuatro temporadas en el Barça, decidió compartir un comunicado en sus redes sociales: