El Deportivo de La Coruña tiene nuevo técnico. Juan Antonio Anquela será el décimo entrenador del club herculino en cinco años. El preparador jienense llega avalado por su dilatada trayectoria y trabajará con el objetivo de devolver al Dépor a la máxima categoría del fútbol español

Era un secreto a voces. Desde que el club coruñés comunicara la no continuidad de José Luís Martí al cargo del primer equipo, Juan Antonio Anquela ha sido el claro favorito para hacerse con el puesto. Carmelo Del Pozo sondeó el mercado en busca de un técnico con experiencia en la categoría y aseguró ante los medios que solo tenía un candidato en mente: Anquela. El técnico de 61 años afrontará el reto más complicado de su carrera. 

Debutó como entrenador en su Jaén natal. Huesca, Melilla y Águilas serían sus siguientes destinos antes de llegar al club que le cambió la vida. En el Alcorcón cosechó distintos éxitos, además de consagrarse como una de las figuras más queridas de la historia el club. Al mando de los alfareros, Anquela logró un ascenso a la Segunda División, disputó un playoff de ascenso a Primera y eliminó al Real Madrid de la Copa del Rey en una eliminatoria para la posteridad. 

Su debut en Primera División fue a los mandos del Granada. En la ciudad nazarí vivió una experiencia corta pero intensa. En enero fue cesado debido a los malos resultados del equipo. Dos temporadas de meritoria regularidad en el Numancia y un playoff de ascenso con el Huesca fueron sus antecedentes previos a firmar con su último club, el Real Oviedo. En tierras asturianas, Juan Antonio Anquela dirigió un equipo sólido, compacto pero irregular. La primera campaña recibió una valoración positiva de directiva y afición pese a no lograr la clasificación para la promoción de ascenso. En la segunda campaña el equipo fue de más a menos. La falta de gol fue lo que más castigó al Oviedo de Anquela.

Ahora afronta el difícil cometido de devolver al Deportivo a la Primera División del fútbol español. El preparador andaluz firma por una temporada y llega acompañado de su equipo de confianza