Sitúense a principios de los 90, concretamente en el año 1991, tal día como hoy, 1 de julio, pero en ese mismo año nacía en La Coruña un chaval, el pequeño de dos hermanos, al que le pondrán de nombre; Lucas Vázquez Iglesias.

Lucas Vázquez comenzó su andadura en el fútbol en club de su barrio, el Centro Cultural Deportivo Curtis al poco tiempo pasó a formar parte del Ural Club de Fútbol para que en el año 2007 comenzase a formar parte de la fábrica madridista de la mano de Michel. Tras tres años formando parte del fútbol juvenil, en la temporada 2010-2011 Lucas pasó a formar parte del tercer equipo, por aquel entonces, más importante del club blanco a nivel futbolístico, pues el gallego comenzó a formar parte del Real Madrid C que militaba en la tercera división. Para aquel entonces ya había sido campeón de la Liga Juvenil y de la Copa de Campeones.

Asentamiento y ascenso

Lucas celebra un gol con el Castilla. Fuente: Real MAdrid
Lucas celebra un gol con el Castilla. Fuente: Real MAdrid

Al siguiente curso Lucas subió un peldaño y apareció con el Castilla en segunda división B, justamente en el año del ascenso a la categoría de plata del fútbol español arroyando a Cádiz y Mirandés en la fase de promoción a segunda A.

Dos temporadas más formó parte de la cantera, las últimas en la Fábrica, una primera notable temporada bajo las ordenes de Alberto Toril en la que el equipo B de los blancos hizo un gran octavo puesto, con un Lucas que jugó 26 partidos y debutando en el primer equipo a las ordenes de Mourinho con gol ante el Oviedo en un amistoso veraniego. Su paso por el filial madridista tuvo un final negro, terminando con la vuelta del Real Madrid Castilla al segunda B. Ese año Lucas jugó cuarenta partidos e hizo 8 goles.

A Barcelona a hacer la mili

Lucas celebra un gol con el
Lucas celebra un gol con el Espanyol. Fuente RCDE

Tras abandonar el Castilla, el de Curtis recaló en el Real Club Deportivo Espanyol donde disputó treinta y tres partidos con tres goles, el primero de ellos a la Real Sociedad. El conjunto catalán quedó décimo y lejos de la presión del descenso. Al finalizar la temporada y con la llegada de Rafa Benítez el club blanco oficializa la opción de recompra sobre Lucas Vázquez para hacerle volver a la que fue su casa.

Etapa dorada

Tras un mal comienzo de temporada en el año de su vuelta por parte de todo el equipo el Real Madrid se aferra a Zinedine Zidane a principios de enero comenzó uno de los ciclos más exitosos del club y de Lucas. Los blancos casi se proclaman campeones de liga recortando al Barcelona más de 10 puntos y en Champions la figura del Real Madrid se iba haciendo cada vez más grande hasta llegar a Milán.

La historia todos la conocen, un chaval de Curtis en plena tanda de penaltis haciendo malabares con el balón como si no le importase lo que iba a pasar ni la presión del momento. Lucas convirtió el penalti y abrió la puerta de la Undécima UEFA Champions League.

Al comienzo de la siguiente campaña fue clave para que el equipo se hiciera con la Super Copa de Europa ante el Sevilla dejando una asistencia en el último minuto para que Sergio Ramos mandará un testarazo al fondo de la red y llevar la final a la prórroga. El siguiente trofeo no tardó en llegar y fue en diciembre, concretamente en el mundial de clubes. En esta temporada Lucas Vázquez fue el jugador de campo más usado por Zidane, a pesar de no jugar la final de Champions frente a la Juventus, Lucas fue clave en la famosa alineación B para conseguir un doblete histórico.

Lucas Vazquez con la Champions. Fuente: Real MAdrid
Lucas Vazquez con la Champions. Fuente: Real MAdrid

Tercera temporada con el primer equipo y tercera Champions consecutiva además de conseguir la Super Copa de España, otro mundial de clubes y otra nueva Super Copa de Europa. En el camino a Kiev fue clave en uno de los mejores partidos de la temporada, concretamente en el Paris Saint Germain - Real Madrid, Lucas dio la asistencia del primer gol que puso prácticamente a los blancos en la siguiente fase del torneo.

Siempre hay sitio para Lucas

Y es que a pesar de no ser un fuera de serie del futbol mundial, el gallego es uno de los jugadores más usados por sus entrenadores desde que llegase al Real Madrid, sus 182 partidos en cuatro temporadas lo abalan, además ha participado en un total de 65 goles, dando así 44 asistencia y 21 tantos para los blancos, además en esto años ha conseguido nada más y nada menos que diez títulos, tres Copas de Europa, tres Mundiales de Clubes de la FIFA, dos Super Copas de Europa, una Liga Santander y una Super Copa de España.