Por fin ha ocurrido.
Para los celtistas que leen estas líneas poca información más necesitan después de los litros de tinta vertidos sobre este tema, pero por fin Santi ha vuelto a casa y ha sido anunciado de forma oficial. El propio Community Manager del Celta hacía una broma sobre un parto complicado y una escena de la película “Lío embarazoso”.
Santi Mina vuelve tras 4 temporadas en Valencia, y su primer objetivo para con la parroquia celeste será hacer olvidar aquellas desafortunadas palabras cuando se concretó su fichaje y que no fueron bien vistas en Vigo, llegándole a pitar cada vez que pitaba el vetusto estadio municipal.
Vuelve tras marcar cerca de treinta goles en más de 100 partidos en Primera, jugar en Europa y conseguir hace unos meses la Copa del Rey con el Valencia. Vuelve más rodado y con la cabeza futbolísticamente más amueblada. Les hemos enviado a un niño y nos han devuelto un hombre. O eso es lo que todos deseamos.
Santi hereda el dorsal número 22 de Gustavo Cabral ya que el que más le gusta, el 7, está actualmente ocupado por Emre Mor, a falta de que se resuelva su salida y sus problemas legales con sus representantes. Firma por 5 años y con él ya son 10 los canteranos que hay actualmente en el primer equipo, en una temporada que se presume ilusionante, sólo hay que ver la cara de Mouriño en las fotos de la firma del joven delantero.
Falta por comprobar ahora si el joven central Saenz finalmente ha sido incluído en la operaración o si el Valencia tendrá que pagar un poco más por el trueque con Maxi Gomez, que ya está en Valencia para firmar y ser presentado también oficialmente.
Con todo, Mina será presentado en Balaídos el próximo viernes 19 a las 19:23, y seguro que el Municipal registra buena entrada para dar la bienvenida a otro de los hijos pródigos.