Pep Biel se ha encargado de liquidar él solo al CD Ebro en el primer ensayo del Real Zaragoza en esta pretemporada. El mallorquín se ha vestido de ‘9’ y ha sido, con su hat-trick, el principal protagonista de un partido del que se han podido sacar las primeras conclusiones del nuevo proyecto de Víctor Fernández. El partido, que ha acabado con un 3-0 a favor de los blanquillos —hoy vistiendo la camiseta avispa— no ha supuesto demasiados problemas. El Ebro, con más de una decena de caras nuevas y con apenas un par de sesiones de entrenamiento no ha podido hacer frente a un Real Zaragoza que se ha mostrado dominante con el balón y seguro sin él.

Sin embargo, esta primera prueba ha servido para ir viendo caras nuevas, y no tan nuevas. Como la de Biel, que ha reavivado uno de los temas más candentes del verano y que más preocupan al aficionado maño, su marcha. La reciente venta de Alberto Soro al Real Madrid por una cantidad irrisoria ha provocado un temor generalizado a que pueda producirse otra salida por un precio mucho menor al de la cláusula. Su gran final de temporada han hecho, que junto a James Igbekeme, sea uno de los jugadores con mejor cartel y por el que el club pueda ingresar una cantidad de dinero tan buena, como necesaria para las arcas del club.

Tres goles y una exhibición

Si bien es cierto que los partidos de pretemporada no son el mejor lugar para comprobar el rendimiento de un futbolista, estos sí que permiten observar el potencial y las capacidades de algunos futbolistas. Ganarse un puesto en el once del Real Zaragoza actual puede ser una quimera, y eso lo sabe un Pep Biel que ha tardado poco en mostrar su calidad y ganas de participar activamente en las alineaciones de Víctor. 

Comenzaba el partido con su tradicional desparpajo, bajando a recibir a posiciones más retrasadas para conducir y regatear rivales llevando el balón hacia posiciones más adelantadas. Ese desparpajo se traduciría en una obra de arte, un gol de bandera, recogiendo el balón dentro del área y haciendo una vaselina al portero arlequinado que sólo pudo mirar cómo se colaba el esférico en su portería. Arrancaría la segunda parte y continuaría el espectáculo. Vigaray sería, esta vez, su socio perfecto. El lateral hacía una gran carrera para posteriormente poner un centro a un Biel que se despegaría de su marca con un gran desmarque y acabaría rematando a placer. El tercer gol llegaría tras un rechace dentro del área que el mediapunta remató con el portero prácticamente vencido.

Pep Biel y Vigaray celebrando el segundo gol | Foto: Real Zaragoza
Pep Biel y Vigaray celebrando el segundo gol | Foto: Real Zaragoza

Tras esta nueva exhibición se abre un dilema. ¿Debe el Real Zaragoza remitirse a la cláusula de rescisión y blindar a Pep Biel? La lógica dice que sí, aunque la lógica decía lo mismo en el caso de Soro. Lo que está claro es que el mallorquín sigue en estado de gracia desde que Víctor le dio la oportunidad de demostrar su valía la temporada pasada. Y eso lo saben varios equipos de LaLiga, que ya están tanteando al jugador y que pondrán alguna oferta encima de la mesa durante este último mes de mercado veraniego. Malvender nunca ha sido la solución, y eso es algo que parece que el Real Zaragoza se niega a aceptar durante estos últimos años. Primero fue Vallejo. Luego Soro. Que Biel no sea el siguiente.