Con la holgada victoria ante el Nápoles, el FC Barcelona de Valverde da por terminada la pretemporada y ya tiene la mirada puesta en el arranque liguero. Los azulgranas, tras dos giras veraniegas, han ido de menos a más y han acabado el último stage dejando un gran sabor de boca.

La fase de preparación de los culés se inició en Japón. El 20 de julio aterrizaban en el país nipón para realizar la gira asiática, donde disputarían dos partidos. El primero, ante el Chelsea FC, dejó un sabor bastante agridulce. Los aficionados pudieron ver por primera vez a Griezmann y De Jong con la elástica barcelonista, pero un bonito gol de Barkley a diez minutos del final supuso la primera derrota de la temporada (1-2).

La victoria tuvo que esperar cuatro días más. Esta ocasión era un partido mucho más especial. Andrés Iniesta, acompañado de David Villa y Sergi Samper, volvía a encontrarse con el club de su vida, pero esta vez de una forma atípica, enfrentándose a él. El gran protagonista fue Carles Pérez, quien se reivindicó con dos goles que sirvieron para vencer al Vissel Kobe (2-0).

De vuelta en Barcelona, miles de seguidores se reunieron en el Camp Nou para presenciar el debut azulgrana en su feudo, en el habitual Trofeo Joan Gamper. El Arsenal FC de Emery no lo puso fácil, ante un Barça que, sin Leo Messi, empezó perdiendo. Un desafortunado tanto de Maitland-Niles en propia puerta y un gol en el descuento de Luis Suárez rescataron a un equipo que necesitaba rodaje (2-1).

Para finalizar, los de Valverde cruzaron el océano, concretamente hacia Miami, para disputar un nuevo torneo, LaLiga-SerieA Cup 2019, que enfrentó por partida doble al FC Barcelona y al Nápoles. En el primer choque, los catalanes vencieron con un resultado apretado y con una buena exhibición de Neto, el nuevo guardameta procedente del Valencia. También debutó Junior Firpo, quien se mostró nervioso y no ofreció su mejor versión (1-2).

En el partido de vuelta, el Barça mostró su mejor versión, sin el astro argentino, el cual se quedó en Barcelona tras lesionarse en su primer entrenamiento. Un partido que sin duda mantendrá a los futbolistas motivados para el estreno liguero del próximo viernes. Todas las líneas estuvieron activas y realizaron un gran papel, con mención especial a la delantera. Dos goles de Suárez, uno de Dembélé, y el debut anotador de Antoine pusieron los cuatro goles en el luminoso (4-0).

El Barça finaliza así la fase de preparación de una temporada que se espera larga y dura. El objetivo es claro, ganar todos los títulos que se disputen, con una mirada especial sobre la UEFA Champions League.