Álex López deberá hacerse un sitio en la Segunda División. La entidad blanquiazul ha hecho oficial este sábado la cesión para la presente temporada al CD Lugo. El centrocampista egarense no contaba para David Gallego y tenía por delante a Marc Roca, Víctor Sánchez, Darder, Granero e incluso a Iturraspe. Sin olvidarnos de un David López lesionado que se postula como pivote titular. Mucha competencia para un Álex López al que condiciones no le faltan. Ya ha demostrado que es un mediocentro todoterreno; buen criterio con el balón, organizador, sacrificado y con capacidad para la recuperación, y además tiene llegada. 

Desde junio del 2018 cuenta con ficha del primer equipo y con Rubi tuvo poco protagonismo: tan solo cuatro partidos de Liga y cuatro de Copa, disputando un total de 385 minutos en los que hizo un gol (frente al Villarreal en la ida de los octavos de final). En cambio, cuando coincidió con Gallego en el filial fue pieza clave. Era uno de los jugadores más importantes del 4-4-2 del técnico suriense y llevaba el peso del equipo. La temporada 16/17, 31 partidos como titular y 4 goles en Segunda División B; y la 17/18 (el año del ascenso), 36 partidos como titular y 7 dianas en Tercera. 

Ahora tiene un ilusionante reto por delante. La categoría de plata puede ser un gran escenario para explotar las condiciones del mediocampista catalán. Debe convencer a un Eloy Jiménez que en esa demarcación ya cuenta con los experimentados Seoane y Pita, y con los recién incorporados Grau y Borja Domínguez. Todo hace indicar que Álex López dará muchas alegrías en el Anxo Carro. Si sus evoluciones son positivas, tiene contrato con el Espanyol hasta 2022, y puede convertirse en uno de los mediocentros del futuro perico.