En la convocatoria de Julen Lopetegui para el segundo encuentro de liga se llevó a los mismos jugadores con la inclusión de Ever Banega, sancionado en la anterior jornada.

Como resultado el once inicial, era prácticamente el mismo salvo el cambio de Óliver Torres, uno de los que se salieron de la lista final, junto a Rony Lopes y Javi Diaz, por el argentino Ever Banega.

La elaboración de juego fue escasa para ambos equipos, pero ha diferencia del curso pasado, el Sevilla FC no demuestra señas de comenzar “tarde los partidos”, aunque su mayor fuerza se encontrara en labores defensivas, pudo influir con destreza en el juego, pues en definitiva consiguió saldar tanto la primera parte como el final de partido sin recibir ni un solo remate del Granada entre los 3 palos.

El nuevo central brasileño Diego Carlos, está cayendo en gracia entre los sevillistas, pues es fuerte e imponente, y junto a Carriço, que con su experiencia aporta todo lo necesario para que no hagan daño desde el conjunto rival. El portugués sigue recuperando las buenas sensaciones que dejó durante las temporadas de desde la 13/14 hasta la 15/16, y tras dos temporadas lastradas de lesiones el curso pasado puro reaparecer, para ahora ser pieza clave de la nueva plantilla de Monchi.

Por otra parte las actuaciones de Fernando (ancla perfecta en el centro del Sevilla FC, recupera y distribuye sin dar lugar a peligros) y sobre todo Joan Jordán, mejor jugador del partido, y no solo por el tanto que haría en el minuto 52, si no que además fue el que más ocasiones generó (2), el que más centros realizó (4) y el que más balones recuperó (10) sumándole el despliegue táctico que aporta con sus balones entre bandas, abriendo el terreno de juego.

Los puntos flacos del Sevilla se encontraban en el ataque, pues Luuk De Jong no disfruto de apenas ocasiones, y la única clara que tuvo no son las de su especialidad, fue en un pase flitrado tras la defensa de Joan Jordán, y sin velocidad en la arrancada, fue superado por la defesa, que blocó su disparo aunque fuese con la mano, posteriormente el rebote caería a los pies de Jordán que con un quiebro y un sencillo disparo al palo contrario anotó el 0-1 del partido.

El Delantero Holandés se tuvo que conformar con fijar bien los centrales, pues desde las bandas no le llegaban centros con claridad para el remate, pues Navas aunque sigue siendo una bala por la derecha, estuvo tan marcado por los jugadores de Diego Martínez que no pudo hacer uno de sus partido de 10.

A su vez Reguilón tuvo que marcharse del terreno de juego al cuarto de hora de juego, tras una conmoción sufrida en un golpe, cabeza con cabeza con Victor Diaz que tuvo que ser intervenido por una brecha, pero pudo volver a los terrenos de juego con normalidad, el madrileño se retiró entre llantos de impotencia viendo que no podía continuar por las náuseas.

Por Sergio Reguilón entro Escudero, que tuvo un par de buenas ocasiones desde fuera del área en jugadas esporádicas, pero que hizo la guerra por su cuenta en la banda izquierda y no pudo aportar lo necesario en ataque.

Y finalmente en los extremos las intervenciones fueron dispares, Ocampos tuvo una buena actuación por la banda derecha, pero su estilo de juego es más asociativo y de trabajo para que otros (como Jesús Navas) acaben la jugada.

Sin embargo, Nolito por la banda izquierda si anduvo más participativo, pero con mucho menos acierto, abuso en exceso de su jugada de control y orientación hacia dentro para buscar el disparo, que no solo desarrollo meno peligro en ataque, pues su finalización fuera deficiente, si no que dejaba aun mas solo a Luuk De Jong, que no recibía un balón claro desde esa banda.

Los otros dos cambios fueron realizados en el centro del campo, primero Gudelj, que aunque en labores de distribución su cambio por Banega fue notoria, con el paso de los minutos se notaba su presencia y el Por qué de su inclusión en el campo, pues con los minutos corriendo en el marcador, y con el Granada tratando de apretar, el serbio aparecía por todo el campo para ser un estorbo más que efectivo.

El otro cambio, menos compresible fue el Mudo Vázquez por Joan Jordán, el Sevilla se quedaba sin un centrocampista con gran desplazamiento de balón, y además rompía los esquemas de contragolpe que se desarrollarían en los últimos minutos de encuentro, con todo el Granada volcado en ataque, es más en una de las ultimas jugadas del encuentro se formó un 4 vs 1 en ataque , que el propio argentino boicoteo, tratando de regatear al único defensor nazarí, la jugada acabó sin peligro, pero si con una mano dentro del área no señalizado como pena máxima.

El resultado de 0-1, algo corto, pero más que justo por la notable superioridad en el campo del conjunto sevillano, que suma 6 de 6 de los puntos de la actual Liga Santander y que iguala las victorias a domicilio en competición liguera, con las del extécnico Pablo Machín.