Luis Suárez ha cumplido sus 250 partidos con el FC Barcelona gracias al estreno del equipo en Champions League ante el Borussia Dortmund. Esta cifra significará algo a celebrar después del flojo partido que hizo en Alemania, que acabó con empate a cero.

En 2014, llegado del Liverpool por 82 millones y con una fuerte polémica encima debida a la sanción que le impuso la FIFA, Luis Suárez se presentaba en el Camp Nou. Un fichaje ilusionante que correspondía a uno de los mejores delanteros del mundo, y que no defraudó. Hasta el momento ha conseguido un total de 179 goles, 96 asistencias,13 títulos (incluida 1 Champions League) e incluso ganó la Bota de Oro en la temporada 2015-16.

El uruguayo se ha consolidado como el “9” de referencia desde su llegada al FC Barcelona y ha demostrado que a sus casi 33 años sigue estando al nivel que exige Ernesto Valverde. En su primera temporada ya consiguió 25 goles en los 43 partidos que disputó. Y, aunque los problemas físicos le han sido un impedimento durante este inicio de temporada, el atacante volvió el pasado sábado para firmar dos tantos que sirvieron para encaminar la victoria del equipo.

Es cierto que Luis Suárez vive una época de ensueño en el FC Barcelona, pero la cosa cambia si hablamos de la máxima competición europea. El atacante sumó otro partido más sin marcar de visitante en la Champions League. Con este, el azulgrana llega a cuatro años y un día sin marcar fuera de Camp Nou en la máxima competencia de Europa. Una pesadilla de la cual el uruguayo no podrá despertar hasta el 23 de octubre ante el Slavia de Praga.

El nueve del Barça será clave este año que se ha iniciado con dudas en la capacidad ofensiva del equipo. Tendrá que desempeñar el papel de “killer” que transforme los tantos en tridente que formará con Antoine Griezmann y Leo Messi.  

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