Las noches de fútbol en Nervión siempre son especiales; a la luz de la luna, en las faldas de la Giralda y bajo el calor que imprime la afición sevillista, que hace del Pizjuán una caldera para todos y cada uno de los equipos que le rinden visita. A todo esto, hay que sumarle que este domingo tenemos un Sevilla-Real Madrid, no hay más que añadir. 

Pocos partidos con mayor envergadura que este hay en la liga española, y es que por todos es sabido que para el Madrid -al menos en los últimos años- visitar el Pizjuán se ha convertido en una ardua tarea. El 2 de mayo de 2015, esa es la fecha exacta del último triunfo merengue en suelo nervionense (2-3). De ahí en adelante, los capitalinos han contabilizado por derrota las cuatro visitas que han efectuado, siendo la más abultada la del pasado año (3-0). Curiosamente, en aquella ocasión los chicos entonces dirigidos por Machín arrasaron al Madrid de Lopetegui en los primeros cuarenta y cinco minutos. 

Ante una posibilidad grandiosa

Como es lógico, el Sevilla no está obligado a ganar el campeonato liguero, ¿pero por qué no puede pelearlo? Es irrefutable que en la mayoría de campañas el combinado hispalense llega al mes de enero compitiéndoles de tú a tú a los colosos, dícese Madrid, Barcelona y Atlético, pero por diferentes causas se termina descolgando de esa pelea (el ritmo de los tres equipos mencionados y la merma del Sevilla). No obstante, este año puede ser diferente, visto que los andaluces manejan un mayor fondo de armario y que la igualdad ha llegado al torneo. 

Por ello, ganar al Real Madrid supondría, aparte de reafirmarse como líder por segunda jornada consecutiva, llenarse de confianza para los siguientes compromisos que exigirán el máximo nivel para alcanzar los objetivos puestos en verano. 

Europa también es sinónimo de alegría

Todo es felicidad para los de Lopetegui, dado que lideran en España y en Europa. Su contundente triunfo frente al Qarabag azerbaiyano lo confirma. A base de insistencia y fortaleza defensiva se fraguó la primera victoria del pentacampeón, que le está tomando el gusto a las faltas con dos tantos de bella factura en menos de una semana. Chicharito en su segundo partido con la zamarra rojiblanca, Munir y Óliver Torres tumbaron en la segunda mitad a un rival que podía plantear algún que otro problema al contragolpe. 

El continental fue el envite con más goles anotados, pero la escasez de goles no le está viniendo mal al Sevilla debido a que en defensa ha dado un salto cualitativo de proporciones sin iguales. Pocos cabezas de serie se recuerdan con tan pocas unidades anotadas, pues acumula cinco en su haber. En el término medio está la virtud. 

Aún con dudas para la lista

Tal y como acostumbra cada vez que juega en casa, Julen Lopetegui aguardará al día del choque para ofrecer la convocatoria, en la cual hay todavía un mar de dudas. Ante eso, esto comentó el técnico vasco: "Que los chicos estén preparados cuando suene el despertador es importante. Vamos a requerir de todos y tienen buena mentalidad. Cuantos más problemas tenga el entrenador para hacer el equipo, mejor."

El Madrid, entre Pinto y Valdemoro

Cierto es que los blancos superaron con éxito su último compromiso liguero, pero el severo correctivo recibido en la que es su competición, la Champions League, ha hecho que la incertidumbre vuelva a reinar en el vestuario de Concha Espina. Pese a que se preveía como un choque placentero para el Madrid por el hecho de que jugaba en casa y porque se marchó al descanso tres a cero, los hinchas blancos no quedaron exentos de sufrimiento a causa de la reacción del Levante, que hasta pudo sacar un punto del Bernabéu, lo que habría dinamitado la marcha madridista. 

Más de lo mismo acaeció en el encuentro de Champions. El lance con los de Tuchel tenía visos de ser una victoria más para los madrileños por las ausencias de los tres tenores parisinos, mas Di María, viejo conocido para los del Paseo de la Castellana, nubló la vuelta a la máxima competición tras anotar dos de los tres tantos finales. 

Por ende, el Real Madrid ha de dar el do de pecho para revertir la situación y ahuyentar todo tipo de malas energías que lo envuelven. Y es que desde que Cristiano Ronaldo pusiera rumbo a Turín, los merengues han ido dando tumbos en todas las competiciones, fue un revés sideral tanto para la planta noble como para los jugadores. Verdad que en el torneo doméstico no llevan una gran década en cuanto a copas levantadas -dos en diez años-, pero en el resto tampoco es que se haya visto a un mejor equipo. El mejor ejemplo está en la humillante paliza que el Ajax de los De Jong, Van de Beek y compañía infligieron en la pasada Champions. 

Zidane se siente respaldado

De igual manera que su homólogo sevillista, Zidane prefirió esperar al domingo para dar la lista de convocados. Lo que sí hizo el sábado fue atender a la prensa, que preguntó al francés si se sentía cuestionado por el club: “No, al revés. Hasta el último momento, la fuerza de todo es esta, la gente que trabaja aquí dentro. Y si no es así, mejor salir”.

Posibles onces