Pudo sacar adelante el Real Betis su importante compromiso liguero ante el Levante (3-1), en un buen partido de los pupilos de Rubi, que hizo disfrutar a su fiel hinchada con un fútbol que al fin parece estar un poco más definido, con un juego directo por bandas y centros al área rival. En líneas generales, no se le pueden poner pegas a ninguno de los futbolistas que participaron en el encuentro, donde cumplieron con creces todos sus integrantes, ofreciendo orgullo y entrega en cada jugada. Pero si hay que destacar una actuación, esa es la de Joaquín Sánchez, ese "chaval" de 38 años que todavía coge a su equipo, se lo echa a la espalda, y ofrece un recital de pases y asistencias cual veinteañero.

El de El Puerto De Santa María cuajó un tremendo partido, después de 524 partidos en la Primera División española y 433 partidos con la elástica verdiblanca, donde dio hasta tres asistencias dignas de un jugador de su clase. Llevó, junto a Canales, la batuta del centro de campo bético, y cuando tuvo que ayudar defensivamente, no se cortó un pelo en bajar y echar un cable a Barragán. Corrió, se desfondó y luchó como si estuviera debutando, dejando claro que todavía tiene cuerda para al menos, haberse ganado ya su renovación por algún año más en la entidad.

Joaquín, con el recital del martes, sigue agrandando su leyenda tanto en el club de sus amores, como en LaLiga Santander, donde ya se sitúa en 5º lugar en partidos disputados (524), solo superado por Paco Buyo (542), Eusebio Sacristán (543), Raúl González (550) y Andoni Zubizarreta, que con 622 ocupa el primer lugar en el ranking histórico.