El pésimo arranque liguero de los de Sánchez Del Amo no está siendo del todo sorprendente para aquellos que han seguido el mercado de fichajes malagueño.

El club superó el límite salarial tras una mala gestión de la directiva y terminó sin inscribir en la competición a dos jugadores,  además de tener que deshacerse del que había sido su mejor incorporación en este mismo mercado, Shinji Okazaki. Este duro golpe mermó mucho al equipo que a pesar de conseguir una victoria en su estreno, no ha conseguido volver a hacerlo por el momento.

En cuanto a lo deportivo, el Málaga lleva 7 encuentros consecutivos sin conocer la victoria, tres de ellos derrotas. Aunque también queda decir que los boquerones ya se han enfrentado a rivales muy fuertes de la categoría. Un ejemplo de ello es el a día de hoy líder de la categoría, Almería o grandes equipos que prometen luchar por puestos de arriba al final de la temporada, Gerona, Rayo Vallecano, Sporting o Albacete.

Un dato a destacar de los malagueños es que en ninguno de sus partidos, ni ellos mismo ni el rival han logrado anotar más de un gol. Este hecho habla del Málaga como un equipo sólido atrás (tan sólo ha recibido 6 goles por el momento) pero con carencias en ataque, evidencia de esto último es que su máximo goleador es por el momento Adrián, con 2 goles.

El análisis táctico

A pesar de esta falta de acierto, la escuadra andaluza ha demostrado ser un rival duro de golear, pues acumula muchos jugadores en el centro del campo partiendo desde el minuto 0 con un 4-4-2 en forma de rombo, un estilo muy similar al del Real Zaragoza. 

Aún teniendo en cuenta el difícil momento que atraviesa el club, los malagueños han demostrado ser un rival difícil de vencer. Además, debemos recordar que esto es la Segunda División y las cosas que no están saliendo durante la temporada pueden salir a relucir todas a la vez en un mismo encuentro. 

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