Sobre la lluvia de críticas de estos últimos días, el francés comentó que sabía dónde estaba y la presión siempre iba a estar. Añadió que lo importante era preparar bien el partido y que hasta el final lo iban a intentar. "Siempre es una final", concluyó.

Con respecto a quien se coloca como su posible sustituto, José Mourinho, Zidane dijo que el fútbol se olvidaba de lo que habías hecho, que le molestaban las críticas pero que todo el mundo podía opinar. Sostuvo que lo único que tenían que hacer era dar el máximo y pensar en positivo, y que conocían la situación de hoy e iban a intentar ganar.

El entrenador del Real Madrid no sabía lo que se juega en este partido, “a mí no me puedes preguntar, yo quiero estar aquí siempre”, añadió. Además, tira de experiencia y presume de conocer ya la situación, expresando que no iban a dejar de luchar hasta el último partido. "Sabemos lo que nos jugamos", reconoció.

Sobre el juego del equipo en términos de intensidad, añadió que era complicado jugar cuando no había nada en juego, la pasada temporada. Además, que no se podía jugar bien siempre y que cada partido era importante. Dijo que había que reducir el margen de error y hacer un gran partido, y consiguientemente explicó que los jugadores eran los primeros en querer dar la vuelta a esta situación, que no tenía dudas de ninguno y que estaban todos en el mismo barco.

Para acabar, ‘Zizou’ admitió que en 25 años había vivido muchas situaciones parecidas y que había que sacar esto adelante, además, que había que demostrar personalidad. "No me sorprende nada de lo que pasa", finalizó.