El Celta llegaba al encuentro con la necesidad de sumar los tres puntos y dar una buena imagen ante su afición, pero la expulsión de Pape Cheikh y el gol del sueco Isak tumbaron cualquier esperanza de los aficionados celestes allí presentes.

El Celta comenzó la primera parte desplegando un juego más ofensivo que el conjunto txuri-urdin, cosa que se vió reflejada en dos remates de Santi Mina de cabeza que no llegaron a ver porteria, la primera ocasión rozó el palo derecho de la porteria de Remiro, y la segunda ocasión se iría por encima del travesaño. Una primera parte sin goles que dejaba ciertas esperanzas de mejoría con respecto a otros encuentros.

Al comienzo de la segunda mitad el conjunto vasco dirigió el encuentro que estuvo marcado por las numerosas protestas de los jugadores de ambos equipos dado a las reiterantes faltas que se provocaban con el paso de los minutos. Lo más destacable un encontronazo de Merino con Iago Aspas, este último le recriminó al txuri-urdin que simulaba una falta , lo que provocó un calentamiento de ambos jugadores y la cartulina amarilla para el gallego. También vería su primera amarilla el mediocampista Pape Cheikh que minutos más tarde por llegar tarde a un balón dividido vería la segunda amonestación por parte del colegiado que se vería obligado a expulsarlo. El aún conjunto de Fran Escribá encajaría un gol en el minuto 81, tanto de el sueco Isak que marcó el único tanto del partido y consiguió los tres puntos para la Real Sociedad.El celtismo se encuentra a la espera de conocer si finalmente Fran Escribá continuará o no al frente de su equipo, lo que si es notable es la división de opiniones entre los aficionados que cada vez más son los que cuestionan al técnico valenciano.